A diferencia del mes de mayo, buen balance lector en este junio caluroso y agobiante. De manera especial, nota muy alta para los tres últimos libros referidos, sin despreciar al resto.
Una de esas novelas que me llamaron la atención desde el primer vistazo fue "La chica de la leica", una amena historia real publicada por Tusquets y escrita por la alemana Helena Janeczek. El relato fue el ganador del premio "Strega", 2018, el mayor galardón literario que se concede en Italia y en cuya nómina aparecen autores como Alberto Moravia, Césare Pavese, Dino Buzzati, Umberto Eco, Elsa Morante Natalia Ginzburg, Claudio Magirs y unos cuantos más. Janeczek nos cuenta la breve vida de Gerda Taro, una fotógrafa que murió en el frente de MAdrid durante la guerra civil española. La autora emplea el giro literraio de ir y venir en el tiempo pra contarnos las andanzas de la protagonista y sus amigos y compañeros de trabajo en la Alemania nazi, en los ambientes judíos de enotonces y en la España de la guerra. Todo está muy imbuido del carácter idealista, ácrata, bohemio y radical de Gerda y quienes le rodean. En ocasiones no me ha resultado fácil seguir lo que narra la escritora germana, y he terminado leyendo el libro un poco a trompicones. Esperaba algo más de un premio Strega.
Marlene Wind es una danesa que es profesora de Ciencia Política de la Universidad de Copenhague, a la vez que directora del Centro de Política Europea de dicha Universidad. Me pareció una buena carta de presentación para leer su último ensayo, "La tribalización de Europa", atractivo título a cuyo interés cabe añadir el anzuelo publicitario de su vitola roja, que nos hablaba de que Wind le había parado los pies a Carles Puigdemont en alguna ocasión. Su ensayo no se centra en el problema catalán al que dedica dos amenos y sugerentes capítulos, sino que se extiende a la cuestión de los nacionalismos y populismos que se han extendido por Europa en la última década, fundamentalmente a raíz de la crisis económica iniciada en 2008. El Brexit, las políticas de los gobiernos húngaro y polaco, la crisis del liberalismo, … son temas tratados con elegancia y agudeza. Tampoco es que la autora nos dibuje soluciones, y por supuesto, lo que dice es susceptible de diferentes opiniones, pero es un tratado breve e interesante.
El "True crime" viene a ser una especie de subgénero de la novela negra que ha despuntado en los últimos tiempos, a lo que puedo añadir que ha "pillado" también mi atención. He buscado en Google una definición y he encontrado satisfactoria ésta:
"El crimen verdadero es un género literario y cinematográfico de no ficción en el que el autor examina un crimen real y detalla las acciones de personas reales". Sin ninguna duda cabe incluir en esta clasificación literaria a
"Sombras de Reikiavik", novela publicada por "RBA" a finales de 2018 y escrita por el periodista británico
Anthony Deane, que con el mismo tema elaboró el documental de Netflix "Out of thin air". El libro trata de la desaparición de dos personas en la capital de Islandia en 1974, hecho que dio lugar a la detención, enjuiciamiento y condena de una serie de individuos. En una primera parte se analizan los hechos y el proceso penal, con si desenlace, mientras que en la segunda se refleja la investigación realizada décadas después que dio al traste con lo que en su día parecía indiscutible. Me ha parecido un análisis minucioso, desapasionado e imparcial de un error judicial, con conclusiones y matices que resultan, como no podía ser de otra manera francamente duros y desazonadores. Paralelamente, Anthony Deane nos ofrece un diagnóstico de la peculiar sociedad islandesa. En definitiva, una novela digna de leer.
Katherine Mansfield fue una escritora neozelandesa cuya corta vida -falleció en 1923 de tuberculosis a los 33 años- se desarrolló entre finales del siglo XIX y principios del XX no le impidió escribir un buen número de relatos de gran calidad, tanta que hay quien ha equiparado los cuentos de Mnsfield a los de antón Chejov. La editorial "Nórdica" ha publicado recientemente una edición ilustrada de
"La fiesta en el jardín". El relato, brevísimo, me ha parecido sencillamente maravilloso. En tan pocas páginas no se puede hacer un análisis social mejor, con u contenido crítico tremendamente fino y sutil no exento de toque poético. Tras leer "La fiesta en el jardín" ha dejado de parecerme frívola y exagerada la comparación con Chejov y he considerado que nunca es tarde para seguir leyendo las narraciones de esta escritora en lengua inglesa con una vida azarosa, una capacidad de lo más plural -era también concertista de violonchelo- y considerada como un adelantada de su época.
Quienes tenemos ya una edad y somos "futboleros" recordamos con pena y estremecimiento la Tragedia de Heysel, cuando cerca de 30 personas fallecieron en una avalancha humana en los prolengómenos de la Final de la Copa de Europa de fútbol de 1985 celebrada en el estadio de dicho nombre ubicado en Bruselas. Es sin duda un buen tema para un libro, y así lo pensó el galardonado escritor francés
Laurent Mauvignier que ganó en 2006 el "Premio FNAC" con
"En la turba", que "Nocturna ediciones" tradujo al español en 2017. No se trata de un relato temporal y pormenorizado del drama ocurrido hace casi 35 años, sino, desde mi punto de vista, de un análisis de la sociedad que gira en torno al mundo de los seguidores de los grandes equipos, así como una introspección psicológica de los diversos personajes -ficticios en el rrelato, pero claramente situados en un mundo real- que aparecen y desaparecen a los largo de las 400 páginas de la novela. En el suplemento de "Babelia" de 9 de agosto de 2017 he encontrado una frase de Jesús Ferrero sobre el libro que me parece elocuente:
"Mauvignier muestra la cara más negra de la sociedad del espectáculo tal como lo entendían los romanos y tal como lo seguimos entendiendo en nuestros días". Un libro magnífico.
No se si fue la curiosidad o la belleza de Sofía Loren en la foto de portada lo que me llevó a comprar
"El arte de llevar gabardina", lo último de
Sergi Pamies, publicado este año por "Anagrama". Pamies suele escribir en catalán, pero este breve libro ha debido decidir que tenga mayor difusión territorial. Debo confesar que inicié sin excesivas expectativas la lectura de un autor del que sabía poco -limitación que habria de incluirse sin duda en mi "debe"- y que oncluso desconocía que Pamies es hijo de Gregorio López Raimundo lider y diputado del PSUC en tiempos de la transición y Teresa Pamies, escritora con vinculaciones políticas cercanas a su esposo. Y esta circunstancia es importante, pues el conjunto de relatos que componen el libro tienen carácter notoriamente autobiográfico. Se trata de recuerdos reflejados de una manera que me atrevo a calificar como tierna y descarnada a la vez. Pamies no teien excesivo pudor en contarnos las intimidades familiares, tanto en relación a sus padres como a su esposa e hijos, y es de agradecer, pues escribe de una forma que te mueve a pensar, a comprender, ... en cierta manera a disfrutar. Sin duda, un libro que ha "rendido" por encima de lo esperado.