El mes de febrero ha dado para siete libros; es posible que no haya incluido en mi lista ninguna obra maestra, pero sí unas cuantas novelas interesantes y amenas. Si tuviera que destacar alguna, pondría el acento en "No hay cuervos", un duro thriller norteamericano, en la ficción sobre la vida de Cervantes que cierra el post y en el "librito de Camilleri", un hombre que siempre ofrece algo. Todo ello sin desmerecer un cruel testimonio de las depuraciones de Stalin, una magistral alegoría sobre los entresijos d ela política actual y el toque sentimental del zaragocismo de un buen autor español contemporáneo. La primera de todas las novelas no me gustó en exceso, pero mi opinión no es ni infalible ni decisiva ...
El primer libro que terminé en febrero fue "Mi impresionante carrera", cuya autora, Miles Franklin, fue una australiana nacida en 1979 que escribió esta novela a los 21 años, circunstancia que tiene sus ventajas, pues en sus formas literarias se nota cierta frescura, pero que también justifica cierta falta de orden y algo de inmadurez. Al parecer se trata de una novela autobiográfica y en ella la autora, después de describirnos la Australia de la época, con curiosas referencias al paisajes y costumbres del lugar, sin omitir menciones a canguros, emúes y zarigueyas, nos habla de su dura vida, cuando tras la ruina personal y económica de su padre, tiene que acostumbrarse a una vida de pobreza, carencias y trabajo esforzado. No sabría definir muy bien el libro, pues en ocasiones me pareció una novela de iniciación, en otras un poco de "rollo" romántico e incluso un relato de costumbres, La verdad es que se trata de una novela que no me ha cogido la atención, e incluso a ratos me ha aburrido algo; solamente en la parte final, cuando la protagonista tiene que ponerse a trabajar como institutriz con una especie de nuevos ricos roñosos que conviven en un ambiente de notable suciedad e incultura, la lectura ha recuperado interés y agilidad.
Hablé hace un mes de la colección "Libros del KO", una serie de brevísimos ensayos en los que importantes escritores nos hablan de sus equipos favoritos; había comenzado por los comentarios de Enric González sobre el Español en "Una cuestión de fe", y lógicamente no he esperado demasiado para leer el que hace referencia al equipo de mis amores, el Real Zaragoza, un librito que escribió hace un par de años nada menos que Ignacio Martínez de Pisón y se titula "El siglo del pensamiento mágico". El relato se lee de un tirón y sirve para pasar un rato delicioso; el gol de Nayim, los "Magníficos", los "Zaraguayos", ... lo más granado de la historia del club de La Romareda queda reflejado en las 57 páginas del libro, sin que falten los sinsabores habituales en la historia del club, las peculiariedades de su afición, los momentos difíciles e históricos y, por supuesto, los recuerdos personales del autor, esos recuerdos que cada cual elige aleatoria y caprichosamente. Curiosamente, el primer partido al que asistió Martínez de Pisón fue un Zaragoza-Logroñés jugado en diciembre de 1971, con los dos equipos militando en 2ª división y que se resolvió con dos goles del paraguayo Ocampos en los minutos 87 y 88, un encuentro que recuerdo como si fuera hoy.
Hoy en día si preguntas por "House of cards", la mayoría contestará que se trata de una magnífica serie estadounidense protagonizada nada menos que por Kevin Spacey; pero ésta no es más que el remake americano de otra que triunfó hace 25 años en la BBC y que estaba basada en la novela con el mismo título escrita por Michael Dobbs, un hombre que trabajó con Margaret Thatcher y que aborrecido de la política terminó escribiendo novelas. Este es el libro que terminé la primera semana de febrero y que podríamos calificar como de política ficción, aunque me temo que tiene bastante de realidad. Y digo "me temo" porque Dobbs nos plantea un panorama tremendo, nos muestra de lo que es capaz una persona hábil e inteligente para auparse en política, algo que hace a costa de no tener ningún límite moral. El relato mantiene permanentemente la atención del lector, ... yo diría que el autor consigue incluso ir incrementándola conforme avanzas con la novela. El personaje de Francis Urquhart, protagonista indiscutible del libro, es uno de los más conseguidos que he leído recientemente. "House of cards" es una novela para entretenerse mucho, para disfrutar, siempre que te gusten este tipo de lecturas, e incluso para agobiarte ... y nada recomendable para quien ande desanimado con el panorama político de occidente ...
"No hay cuervos", del estadounidense John Hart, es una novela negra que viene recomendada desde diversas y plurales atalayas; el blog titulado "Elemental" que sobre el género publica el diario "El País" lo pone como ejemplo de un buen trabajo por parte de un editorial modesta, mientras que en diversos rincones literarios de internet leí en su día críticas muy positivas, alguna entusiasta, sobre la novela. Una vez acabadas las más de 400 páginas del libro tengo que confirmar esos buenos augurios y mantener la opinión de que se trata de un buen trabajo literario en materia policíaca. Es una historia dura, muy dura, humana y bien planteada, con un argumento en el que, habiendo intriga y sorpresas abundantes, el autor va más allá , cuida los personajes y nos ambienta perfectamente la narración en el estado donde él mismo vive, Carolina del Sur. Yo pensaba que era el primer libro de Hart que se traducía al español, pero avanzada la lectura descubrí que ya se había hecho con dos anteriores y que curiosamente uno ya lo había leído hace años, "El rey de la mentira", un thriller judicial que recuerdo muy distinto a "No hay cuervos", mucho más superficial y de un estilo diferente, ... una novela llamativamente inferior a ésta. No me suelen agradar las historias protagonizadas por niños, pero en ésta he superado el prejuicio. Repito, es dura, aunque con puerta a la esperanza y más de un personaje con virtud.
Siempre resulta interesante leer uno de esos "libros-testimonio", siempre que estén bien escritos y nos ofrezcan una historia creíble y honestamente contada, por supuesto. Son frecuentes los que relatan dramas relacionados con el holocausto nazi, los campos de concentración, ... y también con las muchas tragedias personales habidas en la Rusia soviética, especialmente durante las purgas de Stalin. A éstos últimos pertenece "Sofía Petrovna, una ciudadana ejemplar", escrita clandestinamente en un cuaderno escolar entre 1939 y 1940 por Lidia Chukóvskaia y que no pudo salir a la luz hasta más de 50 años después. El libro se encuentra en la línea de "Bajo una estrella cruel", el relato autobiográfico de Heda Margolius Kovály del que hablé hace algo más de un año, aunque el estilo es bastante diferente y si tuviera que elegir optaría por éste último. El libro nos cuenta la historia de Sofía Petrovna, una joven y voluntariosa viuda de Leningrado que trabaja eficazmente como mecanógrafa en una editorial, con un hijo que termina la carrera de ingeniero y que confía absolutamente en las bondades del régimen comunista. El libro tiene claras referencias autobiográficas y relata con tanta habilidad como crueldad los ingenuos planteamientos de Sofía, que ve como su mundo ideal se desmorona y a quien cuesta comprender que lo que ocurre no se debe al error o la casualidad, sino a la propia perversión del sistema.Una historia breve, dramática y que hace pensar.
Andrea Camilleri siempre tiene algo que decir, y más allá de la excelente serie del comisario Montalbano, tiene otras novelas interesantes. Recientemente Destino ha publicado "La banda de los Sacco", un breve e incisivo relato que nos cuenta una historia real, la de los hermanos Sacco, una familia que vivió en Sicilia en los inicios del siglo XX y que tuvo la osadía de no pasar por el aro de los chantajes y exigencias de la Mafia. Camilleri nos ofrece un documentado testimonio de la valentía y la tenacidad de los cinco hermanos Sacco, gente trabajadora, leal y tremendamente honesta, que pagaron bien caro el enfrentarse a un grupo tan poderoso y sanguinario. El libro relata con la maestría propia de quien lo escribe el panorama socio-político de la época, con la mafia siciliana por un lado y el auge del fascismo por otro. No estamos ante una novela negra o policíaca, sino más bien ante un relato tan apasionante como estremecedor que plantea con tremendo realismo las injusticias humanas; se ha escrito mucho sobre la mafia, pero este libro no sobra: quien lo lea no pierde el tiempo, aunque Camilleri ha escrito cosas mejores, que conste.
Nunca está de más una novela histórica y siguiendo el consejo de un amigo he terminado el mes de febrero leyendo "La sombra de otro", un relato en el que el zamorano Luis García Jambrina nos cuenta la vida de Cervantes, con el sugerente lema referido por el propio autor de que "la mejor novela de Cervantes fue vida". La narración es realizada en primera persona por el ficticio albañil Antonio de Segur, quien malherido tras un duelo frente al autor del Quijote decide dedicar su vida a una obsesiva persecución de aquél. La trama es absolutamente original y novelesca, pero tiene la virtud de estar bien escrita, contarnos con frescura el ambiente de la época de Felipe II y Felipe III, y enseñarnos a un Cervantes con todos los atributos de un héroe de ficción: aventurero, mujeriego, osado, ...; un Cervantes con una vida azarosa, verdaderamente de novela, en la que no faltaron la aventura, la desgracia, la ruina y la cárcel. La lectura me costó al principio, pero poco a poco se fue convirtiendo en entretenida hasta llegar casi a apasionante. No cabe duda de que ésto es una virtud, a diferencia de aquellos libros que son como una gaseosa, sugerentes al principio hasta que se desinflan. Me he quedado con la idea de seguir atento a García Jambrina.