21 de septiembre de 2011

Cristiano Ronaldo y la solidaridad

A estas alturas pienso que nadie puede discutir que Cristiano Ronaldo es uno de los mejores jugadores del mundo; posiblemente tan sólo Leo Messi puede superar al portugués, que en el Real Madrid está batiendo records goleadores y que fue determinante para que el equipo merengue se impusiera al Barça en la última Copa del Rey, único consuelo que han podido tener los madridistas en estos años de imperio absoluto blaugrana. El luso es un auténtico privilegiado técnica y físicamente y un consumado maestro en casi todas los tercios que tiene el deporte rey; así lo demostró en el Sporting de Lisboa, en el Manchester United y en la selección portuguesa antes de dar el "pelotazo" y firmar un multimillonario contrato con el Real Madrid de Florentino Pérez. Por cierto, tal vez sea curioso saber que el nombre de Ronaldo se lo puso su madre con motivo de la devoción que ésta sentía por el fallecido presidente de EEUU Ronald Reagan, lo que no deja de tener su gracia. Pero Cristiano Ronaldo, un hombre que encandila a las jovencitas, e imagino que también a alguna no tan jovencita más, no es un personaje que caiga demasiado bien, tiene sus enemigos y despierta tantos odios como pasiones.

De la calidad futbolística de Cristiano Ronaldo no se puede dudar, ni siquiera que su presencia aporta un plus enorme de calidad al juego del equipo que tan polémicamente dirige José Mourinho, tanto que su sola presencia eleva a niveles estratosféricos la ya de por sí evidente temibilidad del conjunto blanco. Pero a mí Cristiano me parece que va de sobrado, que es demasiado consciente de su superioridad y liderazgo y que se trata de un jugador sumamente egoísta en su forma de jugar, tanto que a la larga su forma de actuar acaba perjudicando a su equipo en los partidos decisivos. Semejante "egolatría" se manifiesta de manera especial cuando el jugador viste la camiseta de la selección de Portugal. Con el equipo luso, que ahora entrena ese excelente centrocampista que hizo historia en el Real Oviedo llamado Paulo Bento, Cristiano Ronaldo da la impresión de considerarse el único, el elegido ... su actitud altiva, la forma de atragantarse de balones, las miradas críticas y suficientes hacia sus compañeros, ... aparecen como normas habituales de conducta. No hay más que ver lo que ocurre al señalarse una falta peligrosa a favor del equipo de Ronaldo, la pelota es suya, no parece admitir discusión sobre quien debe tirarla y uno mira su cara y piensa que mejor será que nadie le tosa; salta a la vista que el capitán luso tira las faltas de maravilla, pero no es menos cierto que la variedad de lanzadores añaden el factor sorpresa y en la selección verdirroja hay jugadores de excelentes condiciones para hacerlo, como Maireles, Veloso, Nani o el mismísimo Fabio Coentrao.

El fútbol es un juego de equipo y para que un equipo triunfe no basta con la calidad de sus componentes, pues éstos han de tener además buena forma física, compromiso y solidaridad; nadie discute que Leo Messi es un fenómeno, incluso que en ocasiones es quien marca la diferencia a favor del Barça, pero dudo que el éxito de los azulgrana venga sólo y principalmente de las cualidades excepcionales del argentino, sino de un trabajo de conjunto en el que Messi es la guinda. A Cristiano Ronaldo no le discuto ni calidad, ni ganas, ni profesionalidad ni compromiso, pero me temo que le perjudica -a él y al club que le paga- cierto endiosamiento y un individualismo excesivo y habitual. Todos somos conscientes de las grandes diferencias que se han creado en el fútbol español, el Barça y el Madrid se encuentran a años luz del resto de equipos y parece que hoy en día nadie puede conquistar grandes trofeos sin incluir en su plantilla unos cuantos fenómenos cuya existencia se puede contar con los dedos de las manos y cuestan unos cuantos millones, pero no dejo de echar de menos esas ocasiones en las que la Real de Alberto Ormaechea se llevó dos Ligas a base de pulmón y musculatura con Cortabarría, Satrústegui, Zamora y el toque de López Ufarte o el Athletic de Javier Clemente hizo lo mismo con jugadores de la casa -Goicoechea, Zubizarreta, De Andrés, ...- y el "duende" de Sarabia, o cuando equipos desconocidos como Magdeburgo, Aberdeen o Racing de Malinas se llevaban la Recopa. Cristiano Ronaldo es una muestra más de que hoy impera el glamour y la calidad futbolística, pero tal vez hemos creado ídolos deshumanizados.


14 comentarios:

Driver dijo...

Tengo la costumbre de ver el fútbol quitándole el sonido y fijarme mucho en la cara de los jugadores.
Messi se descojona habitualmente, señal inequivoca de que se divierte jugando. Se comunica con sus compañeros, gesticula, lamenta, perdona, incita, culebrea, deja claro que a la siguiente puede ser.
Cristiano se expresa como el director de una sucursal bancaria, con amenazas veladas y formas desagradables.

Sólo el antifútbol de ciertos equipos italianos ha puesto al Barsa en los límites.

Pero cuando las competiciones son largas, al final gana el que más se divierte, como en tantos otros aspectos de la vida.

El fútbol no se rige por los principios empresariales de mínimo esfuerzo, mínimo riesgo y máximo beneficio.

Para invertir la bolsa, para hacer magia sobre el césped Messi, para meter goles en una sola subida al área contraria los italianos y para vender camisetas a nivel mundial Ronaldo.

Y si tengo que elegir me quedo con el descojono de Messi.
Porque la risa y la creatividad tienen algo en común: la magia.

Modestino dijo...

Tu crees, Driver que esos principios que citas son empresariales? ... Por lo demás, completamente de acuerdo con lo que dices.

Driver dijo...

Tal y como está el mundo empresarial, ya dudo que se puedan establecer principios en un entorno donde la única constante es la incertidumbre.

Las reglas del juego están difusas.

Y los jugadores fieles al equipo vagamos por el campo, más perdidos que un torero tras el telón de acero.

Modestino dijo...

Más que como un torero más allá del telón de acero, los veo huraños como un dandy con lamparones ... y a los del Atlético, como un pato en el Manzanares ...

veronicia dijo...

Si le empiezo a hacer críticas a R7 para rato tengo, pero es que me cae mal; menosprecia a Casillas y a Xabi Alonso... (Raúl y Guti se tuvieron que pudrir con él aquel año... menosprecia a todos los jugadores del orbe...)Lo último en declaraciones ante los silbidos en un partido; "Será porque soy guapo, rico y un gran futbolista, porque me tienen envidia"


El quiere ser un 9, que le pasen la pelota y gol... los otros 10 jugadores están al servicio de su majestad y con ese concepto de equipo en el mundial le fue mal... En el R. Madrid con su entrenador portugués (que yo llamo "el otro entrenador de Portugal") le va mejor (véanse las celebraciones de goles que marcó R7 la temporada pasada y quien fue a celebrarlas con él, hasta que se dieron cuenta y mandaron a los portugueses y Brasileños a hacerle compañía) comparativa con cualquier equipo de la liga donde los goles se celebran en grupo.

R7 desconoce el juego de equipo.
Su egolatría facilita al contrario la defensa porque noquearlo a él es debilitar gravemente la capacidad ofensiva del R. Madrid, pero él no renunciará jamás a ser pichichi... le cueste a su equipo lo que le cueste.

Modestino dijo...

Nunca me había planteado que raúl y Guti se vieran perjudicados por CR7, aunque en el caso del segundo siempre he pensado que su mayor enemigo ha sido él mismo.

Por cierto, espero alguna defensa del luso, que va a parecer que en esta casa nos cebamos.

veronicia dijo...

Que vengan a defendedlo Pepe... (ha dicho que se le va la pinza) Carvalho, Coentrao, Marcelo, Mourinho...

Creo que la Carbonero no saldrá en su defensa... y Kaká es hombre de paz...

Brunetti dijo...

Cuando Cristiano dijo aquello de que la gente le tiene envidia por ser un gran juador de fútbol, rico y guapo, tenía toda la razón.

Otra cosa es la conveniencia de afirmar semejante cosa en público (o en privado). Ahora le envidian y odian aún más, claro.

Por lo demás, me consta que es una persona muy educada que, por ejemplo, no niega nunca una foto o un autógrafo a ningún chaval, algo que yo valoro mucho entre tanto ego que anda suelto.

A nivel futbolístico, y a pesar de que a veces su individualismo perjudica al equipo, tengo la sensación de que sin él en el campo, el otrora galáctico Real Madrid, estaría en la actualidad al mismo nivel que el Mallorca, el Málaga o el Racing.

Salud!

Modestino dijo...

Hombre, Brunetti ... hoy por hoy, el Málaga está por encima de un Racing que aspira al descenso -cada vez que veo a Cuper en la banda pienso que estoy en el siglo pasado, finales eso sí- y un Mallorca descapitalizado, aunque al final siempre salva los muebles.

Y lo de la educación, será a ratos, porque menuda peineta soltó el otro día.

veronicia dijo...

Ayer R7 le hizo la peinta a los del Racing... eso no es de ser educado... no me imagino a Casillas haciéndolo ni en mi peor pesadilla; Xabi Alonso se ha ido a hacer Informe Robinson a la India con los niños... (ya se que es marketing pero me gusta la infancia)

Kaká; es rico, es guapo, es educado, es balón de oro... pero lo mejor "es más listo que hambre" el único en España que se gana 10 millones netos al año con la sonrisa... (No quiero hacer cuentas de lo que gana por segundo de partido, pero eso si que es para no perder la sonrisa...)

Anónimo dijo...

Es un antipatico y un creido.Lo de guapo sera para su "señora"que para gustos colores.
Le falto decir que es superinteligente y que no tiene abuela.

meloenvuelvepararegalo dijo...

Cada vez más los futbolistas no son sólo deportistas sino transmisores de valores, modelos publicitarios o yo qué sé cuántas cosas más.
Y ya que tienen tanta proyección qué bueno sería que esos valores fueran positivos...

Paladín dijo...

soy un gran aficionado al fútbol, y reconozco que Cristiano es un tremendo jugador, pero no he conseguido en uno de sus partidos estar sólamente atento a su fútbol y disfrutar de su juego. Sus gestos , provocaciones, protestas, su aspecto, la reacción del público, es algo que sin darte cuenta esperas y eso, para mi, empequeñece su grandeza futbolística.

Modestino dijo...

Creo que a Cristiano le falta, entre otras cosas, aprender a reírse de sí mismo.