2 de agosto de 2008

Un discurso de David Cameron

Leyendo el ABC uno de estos calurosos días de julio encuentro unos comentarios sobre un discurso pronunciado en Glasgow por David Cameron, el actual líder de los tories británicos y un más que acreditado aspirante a ocupar pronto el número 10 de Downing Street.Cameron afirma que "es preciso abolir esa ley del silencio que impide deslindar lo bueno de lo malo. Hay que llamar a las cosas por su nombre, sin eufemismos, en voz alta. No podemos seguir empantanados en la neutralidad moral, en el relativismo y en la equidistancia. Tal es el reto que a todos nos atañe: a las familias, a los educadores, a los gobernantes".

Cameron nos parece decir que un pais que ha echado por la borda sus referentes espirituales es un pais quebrado. Como bien comentaba Tomás Cuesta, mientras el tejido económico puede recomponerse y al invierno más crudo siempre le sucede el verano, el tejido social, cuando se sobrepasan ciertos límites, es irrecuperable.

Y me vienen estas frases a la cabeza al comprobar la tibieza con la que la oposición de nuestro país ha reaccionado ante las nuevos órdagos que ha planteado el Gobierno anunciando la ampliación del aborto, la implantación de la eutanasia y la modificación de la ley de libertad religiosa. El citado Tomás Cuesta se quejaba recientemente de cómo Mariano Rajoy "ha hecho oídos sordos al órdago moral con que Zapatero le quiere robar la mano". Es una pena que se pretenda pasar de puntillas sobre cualquier valor que no sea negociable en el mercado.

El filósofo inglés Michael Oakeshott decía hace cincuenta años que "Ser conservador consiste en preferir lo familiar a los desconocido, lo contrastado a lo no probado, los hechos al misterio, lo real a lo posible, lo limitado a lo ilimitado, lo cercano a los distante, lo conveniente a lo perfecto, lo suficiente a lo superabundante, ...".

Salta a la vista que ser conservador hoy en día supone nadar contra corriente, y no me hace gracia que dé la impresión de que haya quienes lo hayan convertido en simple lucha por no ahogarse.


Fotos: http://www.telegraph.co.uk/; http://www.imprint.co.uk/




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