18 de agosto de 2010

La tremenda cornada de Luis Mariscal



El domingo día 15 el banderillero Luis Mariscal, de la cuadrilla de Salvador Cortés, a la sazón hermano suyo, sufrió una tremenda cornada en su muslo izquierdo que afectó a distintas venas, entre ellas la safena, y que lo tuvo al borde de la muerte y exigió una operación de cinco horas. La herida tiene cinco trayectorias, y sobre ella precisó el médico que le operó, Ramón Vila, cirujano jefe de la plaza de Sevilla, que «es la cornada más grave, salvo las dos cardíacas —por Manuel Montoliú y Ramón Soto Vargas— que he operado. Nunca he visto una cornada con cinco trayectorias, cinco agujeros en el mismo muslo».; insistiendo en calificar la cornada de "horrorosa", Vila la describió así: que «Le saca el pitón —continuaba Vila— por la zona de la ingle, pero luego se va hacia abajo y rompe también. Ahí ya se producen tres trayectorias. Pero luego hay otra cornada, porque el pitón no puede ir de esa forma en tan corto espacio de tiempo de un lado a otro, por lo que hablamos de dos cornadas en el mismo muslo con cinco trayectorias. Había muchos destrozos y la intervención fue muy complicada».

Luis Mariscal estuvo durante unos cuantos años en el escalafón de matadores de toros, y aunque en sus primeros años llegó a matar un número relativamente importante de corridas, con algún triunfo en Madrid y Sevilla, los contratos fueron escaseando y decidió pasarse a "la plata" e incardinarse en la cuadrilla de su hermano, Salvador Cortés. Quienes hemos seguido en alguna ocasión los toros desde cerca somos conscientes del importantísimo y sacrificado trabajo de los subalternos, de aquí`para allá a lo largo de toda la corrida, peleándose con los toros que les corresponden a su maestro y encarando el tercio de banderillas con tensión y cierto aire de congoja.

La estremecedora cornada sufrida por Mariscal, cuya vida aún no está fuera de peligro, nos enfrenta de nuevo con la cuestión de los toros; yo sigo en mis trece de pensar que por encima de todo es el torero, el hombre que se enfrenta -porque quiere evidentemente- a la fiera el que me merece mayor respeto y cuya vida se ha de cuidar especialmente.


2 comentarios:

mujer prevenida vale por dos dijo...

"alguien tendrá que explicar por qué se permite la tauromaquia, o por qué se condena a ETA y no a Jesulín de Ubrique" Kepa Tamames...

No doy crédito a lo que leo, dejo aqui el vinculo

Modestino dijo...

Una cosa es defender la postura contraria a los toros, algo lícito, con argumentos que suelen tener peso, y otra hacer demagogia barata, que es lo que hace el tal Kepa Tamames .... es como comparar a Jack el Destripador con Joe Frazier.