21 de noviembre de 2014

Adiós a la Duquesa


Ayer falleció Cayetana Fitz-James Stuart y parece que parte del país anda en conmoción; ni la entrada en prisión de Isabel Pantoja, ni la crisis catalana ni los casos de corrupción han podido eclipsar  la noticia del óbito de la Duquesa, que se ha convertido en portada de todo medio de comunicación que se precie. He de reconocer que no conozco demasiados sobre la vida de esta mujer que enviudó dos veces y se casó tres, que tuvo seis hijos, fue suegra de Fran Rivera, parece que hizo siempre lo que quiso y tuvo fama de juerguista. También es cierto que su enorme poder económico, sus grandes propiedades e imagino que más de un privilegio son temas que abren un necesario debate sobre la necesidad de redistribuir mejor la riqueza y  de buscar una sociedad más igualitaria y hasta sobre la oportunidad de tantos fastos funerarios a la vista de la coyuntura social y económica actual.

Ahora bien, en redes sociales, foros y comentarios digitales a la noticia han menudeado frases y epítetos -al menos así me ha parecido- que denotan que a lo mejor hemos perdido el sentido de la medida; es legítimo y razonable cuestionar la acumulación de bienes, tierras y dinero, plantear si se considera que alguien en concreto ha trabajado poco o nada en esta vida, pero llamar "tipeja" a una mujer que acaba de morir y de la que creo no se conoce delito alguno, hacer comentarios despectivos o insultantes no denotan una sabia opinión, sino sencillamente falta de respeto y educación, un estilo que me parece reprobable. 

La Duquesa ya habrá dado cuentas de su vida, dejemosla descansar en paz, respetemos su memoria y el dolor de los suyos, como debe hacerse ante la muerte de cualquier ciudadano, sea quien sea, y sigamos debatiendo como hacer una sociedad más justa y más solidaria, por supuesto, que lo cortés no quita lo valiente.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Descanse en paz. Lo siguiente es un pensamiento con el que no pretendo ofender.
Segun cifras de internet un dia cualquiera mueren mas de 150.000 personas; de entre todas estas tambien segun estadisticas de internet hasta 40.000 mueren de hambre aunque segun otras "solo" 25.000 personas mueren de hambre diariamente.
Ayer murio una de las personas mas ricas de España y toda la prensa habla de ella como siempre que mueren los ricos los poderosos y los famosos.
Segun mis creencias todas las personas que murieron ayer seran iguales a los ojos de Dios.
Si yo fuera tan rica tambien me daria miedo morirme

Modestino dijo...

Una reflexion profunda la tuya, y una demostracion de que se puede ser critico sin insultar a nadie.

quique dijo...

Comparto tus argumentaciones, amigo Modestino...el debate que planteas es justo y oportuno, y un funeral no el mejor momento para despellejar a nadie. De lo que hay que hablar es de la concentración de la riqueza en manos de unos pocos y de la necesidad de redistribuir fortunas que una sola persona tardaría varias vidas en consumir.
Enfín, lo que sí es cierto es que no hay nada que iguale más a las personas que la muerte...un destino que en justicia viene bien repartido para todos, aunque algunos tengan más coronas de flores que otros en su despedida.

Susana dijo...

A mí lo que me ha llamado la atención es lo contrario: las ganas de adular al rico de los periodistas. Un beso.

Modestino dijo...

Lo de las coronas, Quique, de poco le sirve al muerto ... ya lo dijo el Papa Francisco: "A las puertas de ningun funeral he visto camion de mudanza".

Brunetti dijo...

Me ha encantado esta última frase tuya, Modestino, reproduciendo la del Papa. Me la apunto.

En todo caso, soy de la opinión de que la concentración de propiedades en unas cuantas personas es uno de los males endémicos de mi querida Andalucía. En Galicia, pongo por ejemplo, eso no se produce, y ambos territorios pertenecen (al menos todavía) al mismo Estado.

Otra reflexión: en Cataluña, estos fastos no gustan, para qué negarlo. Como tampoco gustan los melodramas protagonizados por folclóricos/as, toreros y/o artistas, en general.

Percibo que estos acontecimientos o circos sólo contribuyen a separarnos cada vez más. Y créeme que no sé la manera de evitar esa desafección.

Un abrazote,

Modestino dijo...

Hablabamos de la muerte de la Duquesa amigo Brunetti, no de la desafección; por cierto por aquí tampoco gusta la acumulación de dinero de los Pujol en Andorra y Suiza ... jeje