29 de marzo de 2012

Luis del Val

El Diario del Altoaragón, como tantos otros periódicos de provincias, trae diariamente una página con artículos de contenido casi siempre político e incluso en ocasiones de un tono más social o costumbrista; los suelen redactar columnistas que extienden sus comentarios por diversos diarios de la geografía española: Julia Navarro, Charo Zarzalejos, Carmen Tomás, Victoria Lafora, Fermin Bocos, Antonio Casado, José Luis Gómez, Francisco Muro de Iscar, Fernando Jaúregui, ... plumas prestigiosas que suelen decir cosas interesantes. No obstante, casi todos se encuentran encasillados, bien entre los partidarios, más o menos velados de uno u otro partido mayoritario, bien en la nómina de los que intentan mantenerse en una más o menos artificial equidistancia. Hay otros que, desde mi punto de vista, ofrecen una cara más independiente e imparcial, es el caso de Antonio Pérez Henares o Andrés Aberasturi; en esta misma línea está Luis del Val, un escritor y periodista aragonés que, bien en la página central bien en la última suele ofrecer comentarios acertadísimos, estupendamente escritos, con mucha chispa, bastante sentido común y una autonomía de criterio envidiable.

Las columnas de Luis del Val suelen ser cortas, incisivas y concretas, llevan ese sello propio de simpatía y cierta ironía, y si tuviera que definirlas con una frase, creo que diría que se trata de comentarios que "dan el el clavo", y es así porque salta a la vista que del Val habla con independencia de criterio, como el que no tiene nada que perder, el que está por encima de tópicos y posturas políticamente correctas. Imagino que, como todos, tendrá también sus detractores, pero no creo equivocarme si afirmo que es de esas partes del periódico que muchos consideramos irrenunciables.

Pero no sería justo reducir el trabajo de Luis del Val a sus colaboraciones en la prensa, ya que se trata de un hombre realmente polifacético: así, es también un prolífico novelista -"Buenos días señor ministro", ganador del Premio Café-Gijón de Novela 1987, "Las amigas imperfectas", "Los juguetes perdidos" y "Prietas las filas"- y autor de piezas teatrales como "Los caballos cojos no trotan", fue diputado por UCD en las primeras Cortes democráticas tras el franquismo, ha presentado programas de televisión, hecho guiones para la tele y trabajado en medios tan variopintos como "Tiempo", "Interviú", "Pueblo", la SER, la COPE, TVE1, Antena-3, Telemadrid, "Diario 16" y Radiocadena Española, de la que fue director. Ha sido premiado con el "Micrófono de Oro" de la Asociación de Profesionales de Radio y Televisión (1989 y 1992), el Premio "Ondas" en 1990 y 2002 y el de la "Asociación Profesional Española de Informadores de Prensa Radio y Televisión" en la categoría de Radio por los "Perfiles Sonoros" de la Cadena Ser.

La primera vez que oí hablar de Luis del Val fue con motivo de las elecciones de 1977; tras no haber conocido otra política que la de Franco, para un estudiante de 2º de derecho de 18 años unas elecciones democráticas se convertían en algo apasionante; así descubrí la figura de Luis del Val, al que mi madre conocía por motivos profesionales, que fundó el Partido Socialdemócrata de Aragón, que concurrió, junto a su lider nacional el legendario Francisco Fernández Ordóñez, a las elecciones coaligado con la UCD de Adolfo Suárez. Luis del Val fue elegido diputado y la verdad es que no supe más de su trayectoria política.

Al cabo de muchos años, más de treinta, tuve la ocasión de conocer en persona al periodista, con motivo de la inauguración en Huesca del nuevo Teatro Olimpia; confirmé que se trataba de un hombre tremendamente simpático e interesante, de una conversación amena y sugerente; me llamó la atención su personalidad, aderezada de una originalidad notoria, como demuestra un detalle tan simple como el de llevar una corbata de lazo. Hablamos de su amistad con mis padres y comprobé que era una persona con don de gentes, a lo que cabe sumar esa naturalidad que hace que desde el primer momento le trates como si le conocieras de toda la vida.


8 comentarios:

Brunetti dijo...

Conocí a Luis del Val hace más treinta años, a través de la radio.

Siempre hacía comentarios muy sagaces, impregnados de intelectualidad.

Su voz era como aterciopelada. Sonaba clara y muy juvenil.

Luego, le perdí la pista. De hecho, creía que había fallecido. Me alegra saber que sigue vivo y coleando, siempre con ese lazo suyo colgado al cuello.

P.D. Aquí la manifestación de esta tarde ha sido masiva. No recuerdo otra semejante en cuanto al número de participantes. Ni tampoco en cuanto a la violencia: se han quemado contenedores, ha habido numerosas cargas policiales y ningún Banco de la Rambla ha quedado sin pintarrajear ("Ladrons", "Feixistas", "Mort al capitalisme", etc).

Si tú o yo hiciéramos algo semejante, mañana a las 9,00h tendríamos un Juicio Rápido y nos crujirían. Estos, sin embargo, saldrán de rositas, como siempre.

Pues eso.

Modestino dijo...

El clan de los totalitarios es cada vez mayor.

Driver dijo...

Hoy escuché a Andrés Aberasturi en la COPE, y me reí con su habilidad para "arrastrar" el tono y los contenidos.
...
En Madrid bastante tranquilidad y un impresionante despliegue policial.
...
Como siempre en estos casos se me vino a la mente el cuadro de Goya "Pelea a garrotazos", donde dos paisanos enterrados hasta las rodillas, se golpean con extrema violencia e infructífera contundencia.

No he visto imagen que nos retrate tan acertadamente.

De Goya me sorprende su universalidad y su actualidad.

Modestino dijo...

Tengo muy serias dudas sobre la bondad de la reforma laboral, pero nunca entenderé la agresividad de algunos.
En cuanto al despliegue policial ... no me parece mal que el Gobierno ponga los medios para garantizar que quien quiera trabajar lo haga.

Driver dijo...

A mí también me parece bien lo del despliegue policial.
Estoy acostumbrado desde pequeño a ver a la policía y a la guardia civil como trabajadores que velan por la gente de bien.
A los jurisconsultos como trabajadores que velan por el cumplimiento de la leyes.
Y a los políticos como...; no, a estos nadie me enseñó a verlos de ningún modo.

Tal vez ahí radique el fallo.
Que nadie te puede enseñar a respetar a quien tiene solo intereses de partido.
Supongo que en el fondo es la razón de tanta abstención.
El razonamiento encaja.

Modestino dijo...

Sí, Driver ... los políticos nos han fallado, pero me da pánico pensar en las alternativas que nos podemos buscar.

Driver dijo...

Si miramos la historia, sólo el surgimiento de nuevos líderes hace que la velocidad de reeducación de una casta se acelere.

En Judea, un líder carismático que pregonaba el amor al prójimo, cambió la Historia.

En Francia, el General De Gaulle aglutinó la idea de nación en unos territorios confusos, desvastados y desmoralizados.

...

En España y a día de hoy, me conformo con una remontada espectacular del Zaragoza como ejemplo de tesón.

¡Veo más probable la salvación de tu equipo que la reorganización moral de la casta política!

Modestino dijo...

:)