El argentino Juan Eduardo Esnáider, que durante la época más triunfal del Zaragoza que dirigía Víctor Fernández ocupó el puesto de ariete, ha regresado al equipo maño para dirigir la Ciudad Deportiva del club y entrenar al filial, el Real Zaragoza B, que navega por el grupo aragonés de la Tercera División. Complicada tarea la que tiene Esnáider, pues la cantera zaragozana lleva mucho tiempo descuidada e improductiva y el filial se ha estancado en el pozo de la 3ª División, donde cayó hace ya cinco años. La afición blanquilla, que siempre ha tenido al ex jugador como un ídolo, ha recibido la noticia con alegría y esperanza, por mucho que al hombre aún le quede todo por demostrar en el mundo de los banquillos y se vaya à encontrar un panorama lleno de incógnitas y un club que ya ha "devorado" a unos cuántos iconos del zaragocismo como Victor Fernández, José Aurelio Gay o el mismisimo Nayim.
Esnáider, que nació hace 38 años en Mar del Plata y destacó desde muy joven en uno de esos clubs argentinos que hoy andan muy venidos a menos, el Ferrocarril Oeste, fue un delantero centro de calidad indiscutible que pasó por muchos equipos -Real Madrid, Zaragoza, Atlético de Madrid, Español, Oporto, River Plate, Ajaccio y Real Murcia- pero, en mi particular opinión, fue en el equipo de La Romareda el único donde cuajó plenamente. No creo que el argentino pueda ser considerado uno de esos arietes legendarios, como en España lo fueron en su día Santillana, Gárate, Hugo Sánchez o Romario, ni siquiera el mejor de los que han vestido la elástica del león -no olvidemos que el número 9 del Zaragoza lo han llevado jugadores como Marcelino, Lobo Diarte, Rubén Sosa, Savo Milósevic y David Villa-, pero su juego cautivó a los zaragocistas y con él como estandarte el equipo logró la mayor hazaña de su historia: la Recopa de Europa, una gesta de la que se recuerda principalmente el milagroso gol de Nayim, pero nadie debería olvidar que la victoria la inició "Gardel", como le bautizó el gran Gaspar Rosetty, con un golazo de antología y que los goles de éste fueron decisivos en las eliminatorias que enfrentaron al Zaragoza con el Feyenoord y el Chelsea.
Esnáider siempre ha sido todo un carácter, y la polémica le ha acompañado allá donde ha ido; ya siendo muy joven y militando en el filial del Real Madrid montó la parda en una concentración de la selección juvenil de su país, y en La Romareda muchos recordamos la que organizó al ser sustituido en el partido de vuelta de una semifinal de Copa frente al Betis: le dio una patada a una botella, dirigió insultos al banquillo y ya en el vestuario rompió una puerta del mismo; también fue noticia sonada una escapada nocturna en una concentración de pretemporada en Biescas junto a Darío Franco y Gustavo Poyet que terminó con una pelea en un pub y una condena del jugador por falta de lesiones. Su carácter también le traicionaba en el campo, de manera que alinear a Esnáider era, además de garantía de lucha y huecos en vanguardia, un auténtico riesgo de quedarse con diez: no pudo jugar la Final de Copa de 1993 frente al Celta por haber dado un codazo a un jugador del Logroñés el sábado anterior, mientras que en su segunda época zaragocista -fue fichado el año 2000 en el mercado de invierno-, se autoexpulsó en el minuto 3 del último encuentro de la Liga frente al Celta cuando su equipo se jugaba nada menos que la permanencia, aunque también es cierto que ésta se logró en gran medida gracias a los goles marcados por el argentino -11 en 17 partidos-.
Cuando se alteraba, algo que sucedía habitualmente, a Esnáider le brillaban los ojos y mostraba una mirada que daba auténtico miedo. No obstante era un jugador que nunca volvía la cara, trabajaba mucho y no era el típico armario estático que sólo se mueve en el área rival; Esnáider partía desde atrás, le gustaba combinar, tenía un excelente juego de espaldas a la portería y arrastraba a más de un defensa, de manera que dejaba abundantes huecos para que fueran aprovechados por sus compañeros: parte del éxito del Zaragoza de la primera época de Esnáider -años 1993-1995- se debe sin duda a los goles que Pardeza e Higuera marcaron aprovechando la constante brega con la defensa rival de su compañero de ataque. Esnáider solamente jugó dos temporadas y media en Zaragoza, pero fueron suficientes para dejar una huella imborrable; suyos fueron goles míticos como los citados en Europa, los dos que marcó en el histórico 6-3 frente al "Dream team" de Johan Cruyff, uno de escorzo frente al Atlético de Madrid en La Romareda y un auténtico muestrario de tantos luchados en solitario el año de su regreso, frente al Las Palmas, Valencia, Deportivo, Oviedo, Rayo Vallecano, ...
A Juan Eduardo Esnáider se le quiere mucho en Zaragoza, siempre se valoró su trabajo y su entrega, se le perdonó absolutamente todo y se llevaba tiempo deseando su regreso. No lo va a tener fácil, son tiempos convulsos en La Romareda y el filial se encuentra encallado en un mar tan agresivo y poco agradable como es la Tercera División, pero tengo la sensación de que es un ganador y que si se tiene paciencia puede formar parte del nacimiento de ese nuevo Zaragoza que los aficionados deseamos casi con desesperación, aunque para que asome me parece que tendrá que venir alguno más y marcharse algún otro.
18 comentarios:
¡Hola Modestino! Una de estas entradas tuyas "futboleras" llenas de pasión...por eso me gustan aunque me entero de poquito ¡hasta me averguenza mi ignorancia! pero procuro seguirlas con todo el cariño del mundo...
Asun
Huy, no te averguences ... jhay que estar muy metido en esto de la pelota para conocer a Esnaider.
Gran jugador Esnaider y mucha pasión en tu entrada. Que te acuerdes de él lo veo normal, pero de sus goles ...
No, si al final le he cogido cariño a "nuestro" Zaragoza
Hay goles que no se olvidan; seguro que siempre recordarás el de Palop al Shakhtar Donetsk.
Esperemos que Juan Eduardo no se convierta en otro ídolo caído en las garras del destructor del Real Zaragoza, Agapito Iglesias, como sucedió con Nayim, Pardeza y Gay.
Juan Eduardo Esnaider ha sido el mejor delantero centro de la historia del Real Zaragoza, y eso que los hemos tenido muy buenos, los dos últimos David Villa y Diego Milito.
No eres el primero que opina que Esnaider ha sido el mejor "9" de la historia del Zaragoza, aunque a mí me gustaban más Rubén Sosa y Savo Milosevic ... y no digo Jordao porque sólo estuvo un año y no se adaptó, a pesar de lo cual metió 13 o 14 goles.
La gloria de ese partido se la llevó Nayim, con su gol imposible; pero siempre he defendido que el gol de Esnaider, técnicamente, es maravilloso.
Igual que la forma de celebrarlo, comparable a la de Marco Tardelli en la final del Mundial de 1982, que es, para mí, la mejor o la más apasionada o hermosa o sentida celebración de un gol en el fútbol moderno.
Larga vida a Gardel (creo que fue Manolo Lama, egabrense de pro, quien le bautizó de esa guisa).
P.D. No olvides tampoco a Lobo Diarte, otro gran centrodelantero blanquillo. Este fin de semana he leído una entrevista suya muy emotiva: ahora se dedica a leer y escribir, sobre todo poesía. Increíble, pero cierto.
Parece ser que está gravemente enfermo, pero sigue luchando.
No sabía lo de la enfermedad de Diarte, un jugador que llegó siendo un crió à Zaragoza. Muy parecido à el, aunque pienso que inferior en calidad fue su paisano Raúl Amarilla. Es curioso que el Lobo se haya vuelto poeta pues en Zaragoza no dejó precisamente fama de intelectual.
En cuanto al mote de "Gardel" Gaspar Rosety al cantar su gol repetía: "Gardel, Gardel, Gardel, ... me vas à matar" y en algún momento creo que dice algo así como "Gardel luego dirán que porqué le llamo Gardel".
Asun no te avergüences (aquí lo importante es participar!) yo sin ir más lejos puedo presumir de saber lo que es un 9! villa es el 9 de la selección, pero en el barça es un 7 como el R7.
(Escucho un sonido de risas a mi sesudo comenterio pero yo impasible...) El 1 es fácil; siempre es el portero (titular).
El 9 es el que mete goles, se le mide por el número de goles que mete...
Y finalmente pregunta a los sabios del blog... de que juega Messi?, que lleva el 10 (como Maradona)
Precioso Gardel!
Ya sólo te queda aprender que son los "centro-chuts", las faltas tácticas y el "piquito del área"
Con mis palabras.
Centro chut, cuando un jugador lanza la pelota hacia porteria con intencion de que la remate un compañero pero coge trayectoria de porteria y puede ser gol
La falta tactica, muy usada para romper el juego del contrario y que tu equipo baje a defender y no lo pille desprevenido. son pequeñas faltas por las que ni te sacan tarjeta amarilla.(Así de forma objetiva porque para los aficionados por lo menos es amarilla)
El piquito del area es la zona pintada en forma de semicirculo en las areas grandes que no se para que sive... pero que crea simetria con el centro del campo...
(a ver cuantas he acertado... pero no me preguntes lo del fuera de juego... que eso da para tesis doctoral)
Pleno!, pero a ti te sopla alguien.
algo me insinuaban... (o los reyes magos me traen la enciclopedia del futbol; por meterme en estos jardines!)
Me acercaba... remotamente...a dos; y lo del piquito del area yo solita! :))))))))))))))))))
Con cariño, para Veronicia:
Siento frustrarte, pero "no podemos dar por válida su respuesta acerca de lo que es el 'piquito' del área".
El 'piquito' es justamente la esquina, es decir, la intersección entre las tres líneas que conforman el área; de manera que en cada área hay dos 'piquitos'. Con papel y un lápiz sería muy fácil explicártelo, pero escribiendo es un galimatías.
De hecho, y para enredarlo aún más, se habla del 'piquito del área grande' y del 'piquito del área chica'. En fin.
Cosa distinta es el 'semicírculo' del área, que sólo sirve para que, en el lanzamiento de un penalty, todos los jugadores que esperan el rechace se hallen, como mínimo, a 9.15 m del punto fatídico.
La verdad es que no sirve para mucho ese "semicírculo", pero me parece muy estético y, sobre todo ..... muy romántico.
P.D. Nada más lejos de mi voluntad parecer un pedante con estas explicaciones futboleras, pero me sabía mal que permanecieras en ese error (gnimio e intrascendente, por supuesto, como todo lo que rodea al fútbol).
Salud!
El fútbol, Brunetti, es la cosa mas importante de las cosas no importantes. Y, por cierto, antes me diste una idea: haré un post sobre la celebración de Tardelli.
Amigo Modestino, solo matizar que una parte de la afición no olvidamos que este "señor" : nos dejó tirados una semana antes de empezar la liga para irse al Madrid, se autoexpulsó jugandonos el descenso para irse con su selección, no fue a la final de copa del 2001 siendo jugador de la plantilla porque no podía jugar, los gestos a toda la grada de la romareda cuando vino con el Atlético de Madrid....
A mi como zaragocista la verdad es que no me ilusiona lo mas mínimo que esté en nuestro club.
Al margen de que su sombra va a sobrevolar toda la temporada la cabeza de Aguirre y eso ya me preocupa mas.
Un saludo
Desde luego su carácter es peculiar. Desconocía Lo de los gestos con la camiseta del Atlético. No se fue al Madrid a una semana del comienzo de la Liga: el equipo blanco pagó los 600 millones de pesetas de su cláusula en el mes de junio, cuando el Zaragoza ya había comprado al Albacete à Fernando Morientes y todo parecía indicar que el pago de la cláusula tenía toda la bendición de Alfonso Solans padre.
Dicen que se autoexpulsó porque Solans hijo le había anunciado que no ejerceria la opción de compra ...
Brunetti, haces muy bien en corregirme; había pensado decir que el piquito del área era donde se van a dar besitos los jugadores cuando celebran gol, pero no veas como se rien aquí de mí :))))
Yo ya trato de fijarme por mí misma.... por ejemplo en si llevan conjuntado el equipamiento con las botas... y cosas así.
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