"El Ferrari de Banega se incendia a las pocas horas de estrenarlo"
Ewer Banega es un joven jugador argentino que fichó hace unos años por el Valencia C.F.; llegó al club che en 2008 procedente de uno de los grandes de Buenos Aires, el Boca Juniors y, con una breve cesión al Atlético de Madrid por medio, ha jugado desde entonces en el centro del campo valenciano. Banega es un volante creativo, con buena técnica y disparo y hasta alguna dosis de genialidad, aunque su trayectoria en Mestalla esté siendo más bien irregular. No obstante, el jugador de Rosario ha ocupado más veces las portadas de los periódicos por sus incidentes al volante que por sus dotes con el balón. Así, el pasado lunes día 30 de julio Banega vio arder a escasos metros de la entrada de la Ciudad Deportiva de su club el Ferrari 360 Módena que acababa de comprar. La Guardia Civil investiga ahora el posible fallo mecánico o el componente que pudo provocar el siniestro, que se produjo minutos antes del entrenamiento vespertino del equipo.
Pero no es ésta la primera vez en la que Banega protagoniza un suceso con su coche, pues en sus primeros días en la capital valenciana dio positivo en un control de alcoholemia, no sin antes haberse saltado un semáforo en rojo, mientras que el pasado 29 de febrero el argentino fue atropellado por su propio coche, un Audi R8, cuando se disponía a repostar en una gasolinera del centro recreativo "Heron City" en Paterna; desconozco si fue descuido o imprudencia, pero le costó romperse la tibia y el peroné y deis meses de baja. No deja de ser sorprendente que para este habilidoso centrocampista acabe siendo más peligroso su propio vehículo que la agresividad de los defensores rivales.
Y la situación me lleva a pensar, también, en si no estaremos malcriando a unos futbolistas que siendo unos críos, casi imberbes y sin demasiada formación previa, se lanzan a conducir coches hiper-rápidos sin encomendarse ni a Dios ni al diablo, de la misma manera que termina siendo chocante, y hasta susceptible de cierto escándalo, ver a un "tirilla" de éstos al volante de coches ultra-caros y de super-lujo, cuando en los tiempos que corren todos deberíamos ser más sobrios y menos "exhibicionistas". La imagen de un futbolista de esos que casi no saben ni expresarse mirando al resto de humanos por encima del hombro con ropa de diseño, corte de pelo a la última y coche rojo no es un buen ejemplo para las nuevas generaciones.
12 comentarios:
Me quedo con la parte final de tu entrada. ¿Qué les llevará a los futbolistas a comprarse esos cochazos con su "primer sueldo"?
Poca madurez, pasión consumista, snobismo, debilidad ante el lujo, poca originalidad, ...
Ah, y muy bueno eso de dedicar un post a Banega y sus coches y decir de este jugador que es "un volante creativo" ¿A cuál de sus facetas te refieres? ;-)
Jajajajaja ... no había caído, pero al volante del coche es más bien destructivo, no crees?
Exacto. Unos niños inberbes de apenas ventipocos años son los ídolos del universo mundo, millonarios y encumbrados como héroes.
No te extrañe que hagan eso y mucho mas.
Besazo
Los encumbramos pronto y desproporcionadamente y en el fondo con frecuencia su único virtuosismo está con el balón.
...yo siempre he pensado de que si en el mundo del fútbol habría un entrenador o club capaz de obligar a sus trabajadores a llegar puntuales -a primera hora- al entrenamiento y utilizando medios públicos (también vale el tranvía de Zaragoza)
Esos coches los tiene quien realmente tiene dinero; tiemblo de pensar lo que traga ese depósito... a su edad importa poco que sea un bien que se devalúe rápidamente, tenga un alto consumo y su factura de mantenimiento sea escandalosa lo que realmente importa es cambiar de coche y a cada cual más caro.
Tomae no me quiero imaginar la que se formaba si baja un jugador al metro, o a coger el bus como un ciudadano más... creo que no llegarían nunca al entrenamiento
El tranvía de Zaragoza deja delante mismo de la vieja Romareda.
Nada más lejos de mi intención disculpar a este pipiolo adinerado, pero me consta que ha habido una partida de "Ferraris" con un grave defecto de fabricación; algo relacionado con el sistemma eléctrico (no tengo ni idea de mecánica).
He leído que "Ferrari" ha llamado a todos sus clientes afectados para alcanzar un acuerdo económico con ellos, aunque vete a saber si esto será cierto.
En cualquier caso, parece increíble que pueda suceder algo así en vehículos de ese nivel, aunque hasta en la Fórmula-1 se producen a veces errores que escapan a una mente acostumbrada, como es mi caso, al sencillo funcionamiento de un Seat-Ibiza, que, dicho sea de paso, va como un reloj y cruza Los Monegros como un caballo desbocado y salvaje....
Salud!
Ahora he recordado que el director de un diario aragonés me contó que era vecino de Peter Luccin, el jugador francés que tras triunfar en el Celta y no lucir ene xceso en el Calderón fue traído hace cinco años por Agapito Iglesias al Zaragoza no se sabe porqué.
Luccin cobró un pastón y fue un fiasco mayúsculo. El citado vecino me contó que el futbolista aparcaba en el parking comunitario un lujoso Ferrari y pensé que lucir el coche rojo fue lo único brillante que hizo el tal Luccin en Zaragoza.
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