El de noviembre ha sido un mes en el que he leído un poco "a empujones", sin demasiada constancia y continuidad. De entre los siete libros terminados, no tengo duda de que lo mejor está en el cnetro: el premio "RBA" de Mosley, el testimonio sangrante de Villalobos y el último "Goncourt".
Comencé el mes con una de las novelas presentadas por los especialistasa lo largo del año como novedad interesante. Se trata de "En el mar", un relato del neerlandés Toine Heijmans, que obtuvo el "Premio Médicis extranjero" 2013, un galardón literario francés que la "wiki" nos dice se concede a un autor cuya "fama aún no empareje a su talento". "Acantilado", con su elegancia y pulcritud habitual, ha editado en nuestro país el libro cinco años después. Hejmans nos cuenta la aventura de un holandés que, en plena crisis personal y profesional, decide navegar en solitario con su velero durante tres meses, llevando en la última etapa de su recorrido a su hija de siete años ... a partir de aquí no cabe contar más sin correr el peligro de aguar la lectura. Se dice que el autor pretende homenajear con esta novela a los autores de grandes relatos de naveganes como "Moby Dick" o el "Ulises", algo que no se si consigue. A mí me ha parecido una novela asequible -151 páginas-, que describe acertada y bellamente el ambiente marino, distinta en algunos momentos, aunque no me ha acabado de convencer ni el personaje principal ni el núcleo argumental.
Walter Mosley es un escritor nacido en Los Ángeles hace 66 años y con una dilatada trayectoria en el mundo de la novela negra. Su estilo es más próximo al "noir" de los Hammet o Chandler que a las tradicionales intrigas policiales de paisanos contemporáneos suyos como Coben o Cónnelly. Hace ya unos cuantos años leí una buena edición de "Roca editorial" de su obra "Muerte escarlata", pero no había vuelto a elegirlo como lectura. Tras ganar el premio "RBA" de este año con "Traición" decidí que podía ser el momento adecuado para leer este autor por segunda vez. Mosley tenía un personaje protagonista habitual, el detective Easy Rawlins, pero en "Traición" opta por crear uno nuevo, Joe King Oliver, también detective, trabajo al que ha llegado tras ser expulsado de la policía por un turbio "affaire" que centra el argumento de este relato. El autor nos habla de miserias personales, corrupción policial, ambientes marginales, ... y destaca un estilo en el que los personajes aparecen como por generación espontánea y el lector necesita ubicarlos mientras lee sus intervenciones. En Mosley destaca la ambientación, propia de las viejas novelas de los grandes del "negro" y unos personajes llenos de fuerza y personalidad. La trama, ... entretenida, sin más, pero lo he pasado bien leyendo a Mosley.
El tema de los menores que huyen de paises centroamericanos rumbo a Estados Unidos me interesa bastante; es un drama real y actual del que es bueno estar al día. Por eso me llamó la atención el libro "Yo tuve un sueño" del joven escritor mejicano, residente en Barcelona, Juan Pablo Villalobos. Un título sugerente -recogido de un lider carismático y legendario como Martin Luther King-, el prestigio del autor -Premio "Herralde" de novela en 2016 y finalista del "First book award" en 2010-, una buena crítica en los suplementos especializados y su condición de libro breve hicieron el resto para que optara por leerlo. Fue un acierto, pues está bien escrito y mueve a pensar y a la solidaridad. Nos cuenta once historias cortas de niños y niñas de Honduras, Guatemala, El Salvador, ... que cruzaron la frontera en busca del bienestar y la libertad de la que carecían, o dicho de otra manera, huyendo de la violencia sexual, familar o callejera. Son historias duras, pero contadas con suavidad y esperanza. Tal vez se eche de menos algo más de extensión en las mismas, pero pienso que el autor no trata de contar historias sino de relatar un drama generalizado y fomentar sensibilidades. Un acierto el contarnos vía anexo el final de las historias relatadas y el buen epílogo del periodista español Alberto Arce.
La literatura francesa siempre ha tenido autores de valía. Por esta razón suelo andar bastante pendiente del premio "Goncourt", entiendo que el galardón más importante de las letras galas. En 2017 el premio lo obtuvo el escritor y cineasta lionés Eric Vuillard, quien ganó con "El orden del día", un libro ambientado en la Alemania nazi que viene a ser como una puesta en la picota de aquellos personajes y empresas que directa o indirectamente, con acción u omisión y sin pertenecer al partido de Hitler, pusieron su aportación al dominio del Tercer Reich. A lo largo del relato Vuillard nos habla de las reuniones en las que empresas alemanas del nivel de "Bayer", "Siemmens", "Telefunken", "BMW", ... colaboraron económicamente con Hitler a cambio de apoyos y beneficios, así como personajes como Nevil Chamberlain, el primer ministro austriaco Kurt Schuschnigg, diversos políticos franceses, amen de hombres propiamente nazis como Von Ribbentrop o Goering. No sabría si encuadrar el libro en el género de la novela histórica, o sencillamente en el del ensayo, pero se trata, sin duda, de un libro original e interesante. La verdad es que me ha gustado mucho, aunque tras haber leído dos terceras partes me parecía magistral y tras su parte final ya no lo he considerado tan brillante. En un blog que sigo con frecuencia, "Un mundo para Curra", la valoración es muy negativa y su autora, de la que me fío mucho, hablaba de que el autor parecía haberlo escrito en medio de un gran enfado ... dejo aquí esta opinión que difiere de la mía. No se si Vuillard acierta en la historicidad de lo que nos cuenta, pero a mí me ha encantado como la expone.
Elizabeth Asbrink es una escritora y periodista sueca que ha tenido la original idea de relatar los que ocurrió en el mundo en un año concreto. Su libro, más un ensayo que un tratado de historia, se titula "1947. El año en que todo empezó" y en él va contándonos acerca de hechos y personajes que adquieren actualidad y protagonismo a lo largo de ese año, importante sin duda en la historia del siglo XX, sobre todo si pensamos que prácticamente acaba de terminar la 2ª Guerra Mundial. Asbrink distribuye los capítulos en los doce meses del año, y allí va relatando, sin orden ni estructura concreta, diversos sucedidos que se leen con interés. Desde acontecimientos históricos como la reconstrucción de Alemania, la independencia de la India y Pakistán o la formación del estado de Israel hasta aquéllo a lo que entonces se dedicaban personajes tan variados y destacados como Simone de Beauvoir, George Orwell, Primo Levi o Christian Dior, entre otros. Contiene hechos dramáticos como las matanzas de la India o la tragedia de los refugiados judíos que son llevados en barco de aquí para allá e historias menos trascendentes. Un libro entretenido que se lee con agrado, aunque el lector pueda tener a veces la tentación de pensar que todo se cuenta de modo más bien deslavazado, saltando de un hecho a otro sin demasiada sistematización , aunque posiblemente forma parte de la intención de la autora.
Khaled Hosseini es el inspirado autor de novelas tan magníficas como "Cometas en el cielo" y "Mil soles espléndidos", entre otras. Por esta razón me pareció una apuesta segura "Súplica a la mar", un breve libro recientemente publicado por "Salamandra" que consiste en un relato ilustrado basado en Aylan Kudi, el niño sirio de tres años que en 2015 falleció ahogado cuando trataba de llegar a Europa y cuya estremecedora foto dio la vuelta al mundo. En tal relato se describe a un padre que acuna a su pequeño niño dormido a la espera de su partida como refugiado rumbo a Occidente. Se trata de genuina prosa poética, llena de ternura y dramatismo, donde se mezclan la angustia y la esperanza y se refleja el amor de un padre que habla en primera persona a su hijo. Eso sí, hay que advertir que hay mucha más ilustración que redacción, que el contenido escrito del volumen es reducidísimo, de manera que ya no cabe hablar de libro breve que se lee en una tarde, sino de una narración editada como esos cuentos que leíamos de pequeños con mucho dibujo y poca letra, tan poca que se lee en un cuarto de hora ... siempre que te lo tomes con calma y sepas degustar el tono poético de Hosseini. Nos podemos preguntar si vale la pena invertir en tan poco contenido, ... habría argumentos para cualquier respuesta, pero no tengo duda ni de la calidad literaria del autor, ni de testimonio que este texto supone ni de la necesidad de agitar de vez en cuando nuestra conciencia y nuestra solidaridad, algo que sin ningún género de duda se consigue leyendo y releyendo "Súplica a la mar".
Tras leer un ensayo de naturaleza histórica no está mal optar por uno filosófico. Me llamó en su día la atención "Historia reciente de la verdad", breve obra escrita por el escirtor y filosofo uruguayo Roberto Blatt. Se trata de un recorrido por lo que se ha entendido históricamente por verdad, de manera especial a partir de la Ilustración, cuando la ciencia y la razón unificaron el concepto. Aprovecha Blatt para hablar de las corrientes literarias, la aparción del periodosmo moderno y la influencia de las redes sociales, deteniéndose -¡cómo no!- en ese concepto tan actual y sugestivo como el de la "posverdad". Se trata d eun libro interesante, a cuyas líneas su autor trata de dotar de profundidad y que nos lleva a un tema tan interesante y sobado como el de la existencia de la verdad, con lasubjetividad que la cuestión suele traer consigo y la objetividad que a la larga todos buscamos. No es un libro para leer deprisa, pues considero que para entender las ideas y cuestiones que plantea es preciso tener paciencia en la lectura y, frecuentemente releer varias veces lo que escribe.
Tras leer un ensayo de naturaleza histórica no está mal optar por uno filosófico. Me llamó en su día la atención "Historia reciente de la verdad", breve obra escrita por el escirtor y filosofo uruguayo Roberto Blatt. Se trata de un recorrido por lo que se ha entendido históricamente por verdad, de manera especial a partir de la Ilustración, cuando la ciencia y la razón unificaron el concepto. Aprovecha Blatt para hablar de las corrientes literarias, la aparción del periodosmo moderno y la influencia de las redes sociales, deteniéndose -¡cómo no!- en ese concepto tan actual y sugestivo como el de la "posverdad". Se trata d eun libro interesante, a cuyas líneas su autor trata de dotar de profundidad y que nos lleva a un tema tan interesante y sobado como el de la existencia de la verdad, con lasubjetividad que la cuestión suele traer consigo y la objetividad que a la larga todos buscamos. No es un libro para leer deprisa, pues considero que para entender las ideas y cuestiones que plantea es preciso tener paciencia en la lectura y, frecuentemente releer varias veces lo que escribe.
1 comentario:
Y digo más de Vuillard: no está a la altura de otros Goncourt, que sigo porque suelen ser una garantía. Me alegro que te haya gustado. Yo casi que es al revés, me gustó casi más conforme avanzaba que al principio. En fin, son gustos. Me apuntaré a Mosley y a ver si logro aficionarme al negro!
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