4 de agosto de 2015

La tormenta desde el sillón


La tormenta suele ser invitado usual en los veranos; en tiempos de calores,  sol radiante y luces naturales,  el cielo se carga de repente y explotan los reflejos y sonidos salvajes de relámpagos, rayos y truenos, mientras el agua cae desaforada, implacable y no pocas veces larga y constante, incluso con la temida y ruidosa compañía del granizo. Son tormentas que limpian el ambiente, que nos traen el necesario efecto refrescante que tanto se agradece cuando ya no sabes como escapar del agobio incesante del calor. En ocasiones la naturaleza se desboca y  la tormenta conlleva efectos indeseables, situaciones que provocan dolor en quien las sufre y deberían movernos al resto a la solidaridad.

Estamos en un verano en el que han proliferado las tormentas, algunas francamente sonoras y contundentes, de las que impresionan. No deja de tener su encanto vivirlas desde el sillón, cómodamente sentado con un libro en la mano o leyendo el periódico, incluso entre las sábanas si aparece por la noche. Y tras el aviso luminoso del relámpago, viene el estremecimiento del trueno que explota salvajemente, mientras asumes un papel entre expectante, temeroso y sereno, porque eres consciente de la fuerza tantas veces imparable de la naturaleza, aunque también te sientes protegido, a buen recaudo. 

Contemplar la tormenta desde la tranquilidad de un sillón, desde la cobertura del propio hogar no deja de ser como ver los toros desde la barrera, aunque al igual que éstos también a distancia permiten disfrutar del encanto propio del evento, observar la belleza y la fuerza que tiene este fenómeno de la naturaleza. Y al fin y al cabo, siempre escampa ... y tras la tempestad viene la calma.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Hola. efectivamente, estamos en tiempo de tormentas y tras la tempestad llega la calma...

tomae dijo...

...las temo amigo Modestino es un miedo insuperable que tengo de mi niñez. ¡Viva Benjamin Franklin el inventor!

Modestino dijo...

:) ... Pues habría que superar ese miedo¡¡¡¡¡