12 de mayo de 2013

Murió una voz increíble


En la madrugada de hoy, domingo, Constantino Romero falleció en Barcelona, tenía 65 años y padecía una enfermedad neurológica. Romero, un hombre polifacético -fue periodista, locutor, presentador, doblador y actor- había anunciado su retirada hace cinco meses y aunque su cara era conocida por todos y su talante, respetado y apreciado, destacaba fundamentalmente por poseer un voz excepcional, una de esas voces casi perfectas, con una dicción magnífica, un tono claro y un volumen excelente, una voz que llenaba el auditorio, el plató, la sala de estar de tu casa. Constantino Romero prestó su voz, por ejemplo, a James Earl Jones en su papel de Darth Vader, de manera que su nombre quedó para siempre unido a una de las mejores trilogías cinematográficas de la historia junto a los de George Lukas, Harrison Ford, Ewan McGregor, Natalier Portman, Alec Guiness, ...

La primera vez que tuve conciencia de la existencia de este hombre de cabeza pelada y bigote característico fue con el "El tiempo es oro", un concurso de TVE dirigido por Sergi Schaaf en el que el concursante había de superar varias tandas de preguntas de cultura general, para ser luego cuestionado sobre un tema específico de su propia elección y finalmente, con la ayuda de dos amigos y documentación enciclopédica, contestar a una pregunta final. Pero la realidad es que el trabajo de Romero venía de mucho antes, fundamentalmente como actor de doblaje, pues además de su referido trabajo en la´s películas de Lukas, puede presumir de haber sido la voz en España de Clint Eastwood -"los violentos de Kelly", "Harry el sucio", "Licencia para matar", "Fuga der Alcatraz", "El sargento de hierro", "Cazador blanco, corazón negro", "Sin perdón", "Los puentes de Madison", "Deuda de sangre", "Million dollar baby", "Gran Torino", ...-, a Arnold Schwarzenegger en las tres entregas de "Terminator" y las dos de "Los mercenarios", a Roger Moore en sus trabajos como James Bond "Octopussy", "Moonraker", "Panorama para matar", ...-, a Sean Conney en "Atmósfera cero" y "Cinco días y un verano", a Donald Sutherland en: "M.A.S.H." y "Novecento", a Rutger Hauer en "Blade Runner", entre otros, además de ser la voz del rey Mufasa en "El rey león", del juez Claude Frollo "El jorobado de Notre Dame" y del Ancestro Mayor en "Mulan". Hay que saber valorar la importantísima función que desempeñan los actores de doblaje, y tras ser conscientes de ello darnos cuenta de la brillantez del trabajo realizado por Constantino Romero.

En Televisión Romero se hizo famoso durante años, trabajando en distintos medios: TVE -"Ya sé que tienes novio" (1985), "El tiempo es oro" (1987-1992), "3x4" (1989), "La vida es juego" (1992-1993) y "Valor y coraje" (1993-1995)-, en Antena-3 -"La Parodia Nacional" (1996-2001), "Tele risa" (1997), "Alta Tensión" (1998-1999), "Tierra trágame" (1999), "Telerisa" (1999), "Una vez en la vida" (2001), "Domino_Day" (2001-2002) y "Pasapalabra" (2002)-, en Telemadrid -"La silla" (2002) y "Reparto a domicilio" (2003)- y en CMT -"Un paseo por Castilla-La Mancha" (2005), "Siempre ellas (2006), "Cantando en familia (2008)" y "Tierra de Tesoros" (2009)-. Como actor de cine su currículum se reduce a tres películas: "La verdad oculta" (1988), de Carlos Benpar, compartiendo reparto, entre otros, con Conrado San Martín, Assumpta Serna, Héctor Alterio, Ovidi Montllor y José Luis López Vázquez, "Di que sí" (2004), de Juan Calvo, junto a Paz Vega, Chus Lampreave, Luis Cuenca, Santiago Segura y Ornella Mutti y "Héroes" (2010), dirigida por Pau Freixas.

En el magnífico obituario que, como siempre, ha publicado "El País" se destaca la calidad de Constantino Romero como actor teatral, siendo alguien a quien recurría Mario Gas, un director de especial olfatop, para trabajos como "L'Opera de Tres Rals" (1984), "Sweeney Todd", de Stephen Sondheim, (1995), "A Little Night Music", de Stephen Sondheim (2000) y "Ascensión y caída de la ciudad de Mahagonny", de Bertold Brecht y Kurt Weill (2007). También destacó en "La botiga dels horrors", dirigida por Joan Lluís Bozzo (1987), "La Orestiada" (2004) y "Beaumarchais", de Sacha Guitry, bajo la dirección de dirigida por Josep María Flotats (2010). En la misma necrológica se pone de reflejo que el gusto y el carisma por el teatro le venía de joven, pues ya "en los años sesenta, siendo casi adolescente, y también con Mario Gas, participó en montajes no profesionales de textos como Historia de una escalera, de Antonio Buero Vallejo, Llama un inspector, de J.B. Priestley y Deja que los perros ladren, de Sergio Vodanovic."

Sinceramente, sabía de las capacidades de Constantino Romero, pero con su fallecimiento he descubierto que se trataba de un hombre dotado para muchas cosas, un verdadero tipo con grandes prestaciones. Descanse en paz.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Además resultaba simpático y familiar

Modestino dijo...

Y de entrada, cuando pensaba que simplemente era presentador, nunca me lo hubiera imaginado en papeles dramáticos.

Tommy dijo...

Tuve la suerte de verle en teatro en "A little night music", una función extraordinaria, y estaba realmente bien. También recuerdo haber visto en la TV3 aquel telefilme llamado "Olimpicament mort" en la que Constantino interpretaba a... Pepe Carvalho (la broma era que tenía cierto parecido físico con Vázquez Montalbán).

Y, claro, le he escuchado en cine incontables veces. Luego ibas a ver las pelis en V.O. y descubrías que su voz no tenía absolutamente nada que ver con la de Clint Eastwood, aunque se le acoplara perfectamente. Romero fue uno de los más jóvenes de una generación irrepetible de actores de doblaje, una disciplina tan complicada como fascinante.

Modestino dijo...

habría que descubrir personajes conocidos entre aquella generación irrepetible de actores de doblaje.

tintin dijo...

Maravilloso calvo, elegante, discreto,ajeno a dimes y diretes,culto y gran profesional de su trabajo.Dios lo tenga en una gran butaca viendo cine y teatro en primera fila .......

Modestino dijo...

Esperemos, aunque a la vista de su funeral Civil se habrá llevado entonces una cierta sorpresa.