El jueves falleció en Benidorm Manolo Escobar, tenía 82 años, padecía cáncer de colon y había sufrido recientemente un ictus cerebral; no deja de ser significativo que falleciera en Benidorm, pues el nombre de la popular villa alicantina no deja de tener que ver con esos felices años 60 del desarrollo, los coches utilitarios, las playas de veraneos de aluvión y el apogeo del toreo en los que encajaba también el llorado cantante almeriense. Me llamó la atención que en uno de esos foros de internet, al hablar del fallecimiento de quien fue llamado "Mister Porrompompero", una persona aseguraba que era el abuelo que todos querríamos tener ... y no es que me parezca una mala definición, entre otras cosas por ser notoriamente realizada desde el cariño y la admiración, pero me hizo pensar que los de mi generación -y "adyacentes"- nos hemos hecho mayores, pues para mí Manolo Escobar sería en todo caso equiparable a la generación de mi padre ... y es que no me cabe ninguna duda que he vivido la época de mayor gloria del cantante, muy distinta a la actual, en la que sin perder ni un ápice de fama y afecto popular, me parece que andaba ya en la nómina de los artistas de otro momento, lo que en tiempos se llamaba "mundo camp".
Manolo Escobar nació en la localidad almeriense de El Egido en 1931 y desde niño tuvo una afición y un don especiales para la música. Su padre era campesino, aunque por lo que se ve era hombre audaz y emprendedor y pronto se dedicó a montar diversos negocios, entre otros un cine en el que sus hijos intervenían en los descansos de las películas. Escobar formó parte de esa Andalucía que emigró a Cataluña y hasta llegar a la cumbre tuvo que sudar tinta, viviendo en habitaciones del barrio chino y trabajando en oficios tan variados como los de metalúrgico, ebanista, albañil y obrero de la empresa química. Con él iban algunos de sus hermanos, como el famoso Baldomero, el líder de la familia que se dedicaba al estraperlo. Resulta inolvidable la presencia de los tres hermanos, Baldomero, Salvador y Juan Gabriel, de Escobar en sus actuaciones guitarra en mano y con sonrisas "profidén". El cantante fallecido hizo el servicio militar en la localidad marroquí de Larache, un nuevo hito de lo más típico de entonces.
El éxito de Manolo Escobar comienza con los inicios de la década de los 60, convirtiéndose en un auténtico fenómeno de masas. Mis primeros conocimientos de la existencia del cantante se remontan a los programas musicales del sábado por la noche, en los que el cantante almeriense aparecía siempre como estrella invitada, al mismo nivel que ídolos del momento como Raphael, Paquita Rico, Juanita Reina o Massiel. Escobar cantaba bien, su repertorio estaba lleno de canciones típicamente españolas, de esas que en la época gustaban a una mayoría de gente, y su carácter sencillo, amable y cercano facilitaba aún más, si cabe, su éxito. Posiblemente sea el "Porrompompero" su primer éxito arrollador, una canción que quedó inseperablemente unida a su persona, aunque es recuerdo que desde la primera evz que le vi en la tele siempre cantaba "Madrecita María del Carmen", canción dedicada a su madre y que siendo cursi y relamida no dejaba de ser todo un detalle. "Mi carro" fue otro de sus discos de oro -consiguió muchísimos- y en el verano de 1973 recuerdo perfectamente recorrer Salou al ritmo del "Viva España", un auténtico bombazo que se extendió por todo el mapa europeo. No nos podemos olvidar de "La minifalda", con una letra realmente significativa y que hoy día vete a saber si alguien la habría censurado por machista ... cualquiera sabe!!. Otros temas inmortales fueron "Soy un hombre del campo", "Que viva el vino y las mujeres" -toda una filosofía de la vida-, "Chiquilla", "¡Ay Caridad!", "La morena de mi copla", "¡Qué guapa estás!", "Almería", ...
En el cine Manolo Escobar también tuvo unas cuantas intervenciones, siendo "Los guerrilleros" (1963), de Pedro Luis Ramírez, su primera película, un film en el que también debutaron Gracita Morales y Rocío Jurado. Con Ramón Torrado protagonizó "Mi canción es para tí" (1964), "Un beso en el puerto" (1965) y "El padre Manolo" (1966), con José Luis Sáenz de Heredia, "Pero ¿en qué país vivimos" (1967), "Relaciones casi públicas" (1968) y "Juicio de faldas" (1969), las tres compartiendo estrellato con Conchita Velasco, con Mariano Ozores "En un lugar de la Manga" (1970), con reparto "espectacular": Concha Velasco, Gracita Morales, Jose Luis Lopez Vazquez y Manolo Gomez Bur, con Luis Lucía, "Entre dos amores" (1972), con Juan de Orduña "Me has hecho perder el juicio" (1973), etc, etc ... como se ve todas con títulos llenos del "ingenio" de la época y con compañeros de reparto de lo más granado del momento: a los ya citados cabe añadir Sara Lezama, Antonio Ferrandis, Rafael Aparicio, Manuel Aleixandre, Florinda Chico, Alfredo Landa, ...
Manolo Escobar se casó con una alemana, Anita Marx, la había conocido en Playa de Aro y contrajo matrimonio con ella en Colonia, cuando todavía él no hablaba alemán ni ella español; el matrimonio duró 53 años, hasta la muerte del cantante, lo que demuestra que la monogamia es buena hasta en la farándula. Ambos adoptaron a una niña a la que llamaron Vanessa y a la que el cantante dedicó su tema "Mi bella flor"; a partir de esta adopción el número de Vanessas españolas se incrementó notablemente.
Ahora a Manolo Escobar le ha llegado la hora de descansar de una vida larga y exitosa, de una carrera profesional bien llevada, desempeñada con la sonrisa en la boca y el arte en la garganta. Descanse en paz.
4 comentarios:
Sobretodo destacaría lo más importante, que era una buena persona. Descanse en paz. Un beso.
Qué bien te ha quedado lo de "Mundo Camp", más o menos lo que las gentes finas de ahora llamarían "Vintage"...
Su aparición estelar en la hiperbólica celebración del Campeonato del Mundo de Fútbol cantando "Que viva España" no sólo fue representativa de una popularidad de la que nunca dejó de gozar en más de medio siglo. Esa canción, aunque compuesta en el extranjero, es una especie de himno nacional paralelo, aunque sólo sea porque tiene la letra de la que carece el oficial, cosa que, por otra parte, jamás ha importado en los estadios de fútbol, en donde se corea con el socorrido "chanta-chanta".
Y en cuanto a su carrera en el cine, sólo Raphael puede presumir de haber rodado tantas pelis como él. Además, a Manolo (cuyos personajes en el cine solían llamarse igual que él) no había que doblarle, a diferencia de lo que sucedía con otras estrellas de la canción de la época que cantaban con su propia voz, sólo faltaría, pero que después decían los diálogos con la de Emilio Gutiérrez Caba, por poner un ejemplo.
Si, Susana, hay unanimidad en lo buena persona que era, todos hablan bien de el, tirios y troyanos.
Que de cosas sabes Tommy.
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