La primera vez que supe de la existencia de Herbert Lom fue en una colección de cromos de artistas de todo tipo que a su vez servían de cartas de la baraja; entre muchos otros recuerdo a Bob Dylan, Mick Jaegger, Jane Fonda, Twiggi, Michael Caine, Herb Alpert y Shirley Bassey. Herbert Lom, que nació hace más de 90 años en Praga cuando la hoy capital checa estaba incardinada en el imperio austro-húngaro, me llamó la atención por el exotismo de su cara, tanto que al actor le fueron encasillando en papeles de "extranjero sospechoso"; en una entrevista concedida en 1991, Lom aseguró con ironía y resignación que "a los ojos de los británicos, todos los extranjeros son siniestros"..Desde ese encuentro de cromos infantiles Herbert Lom ha ido apareciendo en un montón de películas de los más diversos géneros, mostrando una gran capacidad de adaptación a papeles de lo más diverso, aunque casi siempre, como queda dicho, con un toque misterioso.
Uno de los papeles más brillantes del actor es el de Napoleón Bonaparte en "Guerra y paz" (1956), la formidable superproducción que dirigió King Widor y en el que Lom acompañó a primeras figuras como Audrey Hepburn, Henry Fonda, Mel Ferrer y Vittorio Gassman; es cierto que a Herbert Lom no le correspondió ninguno de los papeles protagonistas, pero no cabe duda que posiblemente fuera el emperador francés el personaje más llamativo y enrevesado del guión. Por cierto que el actor ya había hecho de Napoleón en la película "El vencedor de Napoleón" (1942) de Carol Reed.
Entre mis recuerdos infantiles en materia cinematográfica está la proyección en el cine dominical del Colegio de la Compañía de María de una versión de la gran novela de Julio Verne "La isla misteriosa" (1961), un film dirigido por Cy Endfield en el que siendo los actores principales Michael Craig y Joan Greenwood, le vuelve a tocar a Herbert Lom el papel más espectacular, pues encarna ni más ni menos al mísmísimo Capitán Nemo, ya pasados los tiempos de las 20.000 leguas de viaje submarino y disfrutando de una especie de autoexilio dorado en la isla donde se desarrollan las espectaculares aventuras que ideó el gran escritor francés.
Siendo más mayor volví a encontrarme al actor desde el asiento de mi sala de estar al aparecer en dos películas que reponía TVE y que fueron de mi agrado. Muy especialmente queda en mi memoria "El quinteto de la muerte" (1955), una película de Alexander Mackendrick de la que ya hablé aquí y que es sencillamente deliciosa; en este film Lom comparte cartel con actores tan notables como Alec Guiness y Peter Sellers y, entre el grupo de maleantes que tratan de engañar a una venerable ancianita, le corresponde el papel del más villano entre los villanos, un auténtico matón con aires de psicópata, vestido todo de negro y que no abandona su cara de mala uva en toda la cinta.
La otra película a la que hacía referencia es la versión de "El fantasma de la ópera" (1962) dirigida por Terence Fisher y en la que, como no podía ser de otra manera, al actor le toca hacer de fantasma. Una nueva ocasión para representar un papel "especial". Cuentan los que saben de ésto que los productores de la película, la "Universal", esperaban que Cary Grant confirmara sus deseos de protagonizar uno de sus films; se intentó convencer al actor a toda costa, elevando a 30.000 libras el presupuesto existente, para que de esta forma el actor firmara sin cuestionarse demasiado, incluso Anthony Hinds (que escribió el guión utilizando el seudónimo de John Elder) realizó algunos cambios en el guión inicial, para adaptarlo a la personalidad cómica de Grant. Pese a todos los esfuerzos realizados por los representantes de la casa del martillo, el actor finalmente decidió no participar en el proyecto, por lo que la Hammer quedó sin pan ni pedazo. Este fiasco permitió que entrase Lom en escena.
Herbert Lom también tiene su papel de "Espartaco" (1961), la gran película de Stanley Kubrick, aunque he de reconocer que aquí no conservo memoria de su interpretación de Tigrano Levanto. Sí que recuerdo algunas de sus siete apariciones en la serie de películas de la pantera rosa que dirigió Blake Edwards y en las que daba vida al Inspector Charles Dreyfus. También recuerdo su papel en un film menor, una versión de "Diez negritos", una de las más célebres novelas de Agatha Christie, dirigida en 1974 por Peter Collinson y llena de nombres famosos: Oliver Reed, Elke Sommer, Richard Attenborough, Teresa Gimpera, Alberto de Mendoza, Charles Aznavour, Orson Welles, ... Herbert Lom encarna a un cirujano con problemas de alcoholismo a quien se le murió un paciente por operarle en estado etílico.
Otras de sus películas destacadas, aunque no pueda dar fe de ello, son "El séptimo velo" (1945), de Compton Bennett, ganadora del premio Oscar 1946 al mejor guión oroginal y "Dual Alibí" (1946), una película del género policíaco, donde interpreta un exótico doble papel como mellizos trapecistas. También son importantes "Noche en la ciudad" (1950), de Jules Dassin, junto a Richard Widmark y Gene Tierney, donde vuelve a hacer el papel de "hampón", "Secreto de estado" (1950), de Sidney Gilliat, con Douglas Fairbanks jr. y Jack Hawkins y "El Cid" (1961), de Anthony Mann, nada menos que con Sofía Loren y Charlton Heston y en el que, ¡cómo no!, representa al moro Ben Yussuf.
Tal vez haya quien al ver a este actor en la entrada de hoy haya intuido su fallecimiento, pero a pesar de que nació en 1917, no me consta que haya muerto, simplemente me ha parecido interesante sacar partido a un artista que siempre me llamó la atención.
Uno de los papeles más brillantes del actor es el de Napoleón Bonaparte en "Guerra y paz" (1956), la formidable superproducción que dirigió King Widor y en el que Lom acompañó a primeras figuras como Audrey Hepburn, Henry Fonda, Mel Ferrer y Vittorio Gassman; es cierto que a Herbert Lom no le correspondió ninguno de los papeles protagonistas, pero no cabe duda que posiblemente fuera el emperador francés el personaje más llamativo y enrevesado del guión. Por cierto que el actor ya había hecho de Napoleón en la película "El vencedor de Napoleón" (1942) de Carol Reed.
Entre mis recuerdos infantiles en materia cinematográfica está la proyección en el cine dominical del Colegio de la Compañía de María de una versión de la gran novela de Julio Verne "La isla misteriosa" (1961), un film dirigido por Cy Endfield en el que siendo los actores principales Michael Craig y Joan Greenwood, le vuelve a tocar a Herbert Lom el papel más espectacular, pues encarna ni más ni menos al mísmísimo Capitán Nemo, ya pasados los tiempos de las 20.000 leguas de viaje submarino y disfrutando de una especie de autoexilio dorado en la isla donde se desarrollan las espectaculares aventuras que ideó el gran escritor francés.
Siendo más mayor volví a encontrarme al actor desde el asiento de mi sala de estar al aparecer en dos películas que reponía TVE y que fueron de mi agrado. Muy especialmente queda en mi memoria "El quinteto de la muerte" (1955), una película de Alexander Mackendrick de la que ya hablé aquí y que es sencillamente deliciosa; en este film Lom comparte cartel con actores tan notables como Alec Guiness y Peter Sellers y, entre el grupo de maleantes que tratan de engañar a una venerable ancianita, le corresponde el papel del más villano entre los villanos, un auténtico matón con aires de psicópata, vestido todo de negro y que no abandona su cara de mala uva en toda la cinta.
La otra película a la que hacía referencia es la versión de "El fantasma de la ópera" (1962) dirigida por Terence Fisher y en la que, como no podía ser de otra manera, al actor le toca hacer de fantasma. Una nueva ocasión para representar un papel "especial". Cuentan los que saben de ésto que los productores de la película, la "Universal", esperaban que Cary Grant confirmara sus deseos de protagonizar uno de sus films; se intentó convencer al actor a toda costa, elevando a 30.000 libras el presupuesto existente, para que de esta forma el actor firmara sin cuestionarse demasiado, incluso Anthony Hinds (que escribió el guión utilizando el seudónimo de John Elder) realizó algunos cambios en el guión inicial, para adaptarlo a la personalidad cómica de Grant. Pese a todos los esfuerzos realizados por los representantes de la casa del martillo, el actor finalmente decidió no participar en el proyecto, por lo que la Hammer quedó sin pan ni pedazo. Este fiasco permitió que entrase Lom en escena.
Herbert Lom también tiene su papel de "Espartaco" (1961), la gran película de Stanley Kubrick, aunque he de reconocer que aquí no conservo memoria de su interpretación de Tigrano Levanto. Sí que recuerdo algunas de sus siete apariciones en la serie de películas de la pantera rosa que dirigió Blake Edwards y en las que daba vida al Inspector Charles Dreyfus. También recuerdo su papel en un film menor, una versión de "Diez negritos", una de las más célebres novelas de Agatha Christie, dirigida en 1974 por Peter Collinson y llena de nombres famosos: Oliver Reed, Elke Sommer, Richard Attenborough, Teresa Gimpera, Alberto de Mendoza, Charles Aznavour, Orson Welles, ... Herbert Lom encarna a un cirujano con problemas de alcoholismo a quien se le murió un paciente por operarle en estado etílico.
Otras de sus películas destacadas, aunque no pueda dar fe de ello, son "El séptimo velo" (1945), de Compton Bennett, ganadora del premio Oscar 1946 al mejor guión oroginal y "Dual Alibí" (1946), una película del género policíaco, donde interpreta un exótico doble papel como mellizos trapecistas. También son importantes "Noche en la ciudad" (1950), de Jules Dassin, junto a Richard Widmark y Gene Tierney, donde vuelve a hacer el papel de "hampón", "Secreto de estado" (1950), de Sidney Gilliat, con Douglas Fairbanks jr. y Jack Hawkins y "El Cid" (1961), de Anthony Mann, nada menos que con Sofía Loren y Charlton Heston y en el que, ¡cómo no!, representa al moro Ben Yussuf.
Tal vez haya quien al ver a este actor en la entrada de hoy haya intuido su fallecimiento, pero a pesar de que nació en 1917, no me consta que haya muerto, simplemente me ha parecido interesante sacar partido a un artista que siempre me llamó la atención.
11 comentarios:
El comentario de Lom es buenísimo, no podría ser más verdadero. :))
Oí en una ocasión hablar de un español que llevaba más de 26 años viviendo en Londres y en la oficina donde trabajaba, tras una victoria de la selección inglesa de fútbol comentó: "Ayer ganamos", a lo que su compañero de despacho contestó en tono irónico: "¿GanaMOS?" ... se ve que no debe ser fácil integrarse.
Creo que fue Michael Caine quien dijo una vez que a los actores británicos se les mira mal por sus colegas norteamericanos porque se les achaca un complejo de yo-soy-mejor-actor-que-tú-porque-he-interpretado-a-Shakespeare-y-tú-no, y que la industria USA se venga de los ingleses ofreciéndoles papeles de malos, sobre todo, añadiré, en las pelis sobre la Guerra de la Independencia estilo "El patriota".
Ah, yo también tenía cromos de esa colección de la que hablas, amigo. Cuando quieras nos cambiamos los repes.
Esos cromos desaparecieron hace muchísimos años ...
Es imposible, parece. :)) La solución es hacer lo mismo, o tal vez mejor. :))
Los actores británicos están a años luz de la mayoría de actores americanos, sin duda. Ni color.
Me ha encantado la frasecita"a los ojos de los británicos, todos los extranjeros son siniestros"...genial. ¿Conoces la devastadora serie de la BBC "Little Britain" ? Los caricaturiza de modo magistral, y uno de sus rasgos es ese precisamnete. Y conste que me encanta lo brithish, of course.
Larry Oliver, Peter O'Toole, Richard Burton, Alec Guinnes, Anthony Hopkins, ... Efectivamente el listón de actores británicos está muy alto.
Modestino, has nombrado El quinteto de la muete y he reconocido el argumento... por lo visto los hermanos Cohen lo adaptaron en the ladykillers resulta una película muy "de los Cohen"
Mariapi; yo veo Litlle Britain (terapeuticamente desternillante)
Por cierto... Jude Law, Daniel Craig, Tim Roth,los ingleses pueden estar tranquilos tienen filón para rato.
No he visto "Ladykillers", pero puedo apostar que no hace olvidar al "Quinteto de la muerte", una inolvidable comedia negra, de la misma manera que tampoco, por ejemplo, "Primera plana" -una excelente película- supera a la gran "Luna nueva" que protagonizaron Cary Grant y Rosalínd Rusell.
Como superar a Alec Guiness?
De Sir Alec Guiness tendría que hablar a no tardar mucho.
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