23 de agosto de 2013

¡Vaya nombre para un perro!


Paseaba el otro día, en plenas fiestas de San Lorenzo, por los alrededores de la Plaza de San Antonio de Huesca cuando escuché unos ladridos, el autor de los mismos era uno de esos perros pequeños y "lanudos", el cual era portado a través de una correa por su dueña, una mujer ya madura que se encontraba charlando en pleno "capazo" junto a otras personas; en cuanto aquélla percibió la impaciencia del can, se dirigió a éste y con voz enérgica y firme le gritó: "Pericles, cállate", orden que acreditó la autoridad de la señora, pues el bicho no volvió a decir ni mu ... aunque he de admitir que hubiera sido un auténtico prodigio de la naturaleza que "Pericles" hubiera dicho "mu".

Evidentemente la anécdota no tiene relevancia alguna, pero debo reconocer que me llamó poderosamente la atención que alguien haya tenido la idea de llamar Pericles a un perro. Como es sabido, Pericles fue un importante e influyente político y orador ateniense en los momentos de la edad de oro de la ciudad, un personaje de una enorme influencia en la historia de Grecia, un auténtico avanzado de la humanidad que promovió más que nadie las artes y la cultura, gestión que mueve a atribuírle buena parte del esplendor artístico y cultural de la Grecia clásica, un logro cuyos vestigios aún podemos disfrutar. Por esta razón me pareció casi una osadía atreverse a bautizar con tal nombre a un simple animalito de compañía; por supuesto que somos libres para llamar a nuestros perros como nos plazca, pero si acudimos a la historia -real o ficticia- los apelativos que contemplas parecen mucho más adecuados: Lassie, Laika, Rin tin tin, Goofy, Pluto, Milú, Snoopy, ... aunque también es cierto que existe una película protagonizada por un perro llamado Beethoven, pero parece la excepción, y es que no me hago a la idea de tener un chucho y ponerle como nombre Cisneros, Cervantes, Jovellanos u Ortega y Gasset ... Aunque ahora me acuerdo de un tipo que conocí en Tarragona que tenía un basset de esos gordos, con orejas largas y papada al que se había atrevido a ponerle el significativo nombre de Gil Robles ... "cosas veredes" ...

7 comentarios:

Susana dijo...

Qué bueno. Menos mal que no lo llamó Platón. Un beso.

Anónimo dijo...

Cada año tenemos varios gatitos así que podemos turnarnos en poner los nombres, suelen ganar los nombres de dibujos animados infantiles Areni, Mina y ultimamente mi sobrino no para con llamar a uno spiderman...

Modestino dijo...

O Socrates, o Kant ... o Nietzsche. Saludos Susana, te debo mas de una visita.

Modestino dijo...

Mas que Spiderman, deberia ser Spidercat ;)

Modestino dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Alberto dijo...

Estando en Cambrils, pude ver como una pareja llamaba a su perro, un caniche, con el nombre de "Messi"...

Modestino dijo...

Algún perro se llamará Agapito ... ;););)