Los primeros Mundiales que ganó Brasil fueron los de 1958 y 1962; en ellos la selección carioca se mostró imbatible y en ello tuvo mucho que ver la mítica delantera que formaron Garrincha, Didí, Vavá, Pelé y Zagalo, cinco auténticos artistas del balón que consiguieron entre los cinco la friolera de 23 goles a lo largo de ambas fases finales. Todo el mundo reconoce a Edson Arantes do Nascimento, "Pelé" como la gran figura de los brasileiros, pero por el extremo derecha brillaba un jugador distinto, con una velocidad endiablada y que era el rey de la gambeta, una auténtica tortura para el lateral que debía marcarle; se trataba de Garrincha, cuyo verdadero nombre era el de Manuel Francisco dos Santos, debiendo su apelativo al nombre de un pájaro que vive en las selvas del Mato Grosso.
Garrincha fue un personaje especial: nació y murió en la miseria, pero entretanto dio muchísimas tardes de gloria tanto a la afición del Botafogo como a la apasionada "torçida" de la selección nacional de Brasil. Garrincha tenía los pies girados 80 grados hacia adentro, su pierna derecha era 6 cm más larga que la otra y tenía la columna vertebral torcida, problemas que se vieron agravados por una severa poliomielitis, de niño le operaron, pero no lo hicieron bien y le quedaron las piernas torcidas. Nada hacía presagiar que con este historial clínico el chaval pudiera salir adelante en esto del fútbol, pero en Brasil todo es posible si del deporte rey se trata y Garrincha supo aprovechar su defecto físico para confundir a los defensas, amagando jugar para un lado para acabar yéndose para el otro. Ver jugar a Garrincha equivalía a ver jugar un extremo nato capaz de hacer las mayores diabluras en el campo, se convirtió en uno de los más grandes regateadores de la historia del balompié. Su equipo de siempre fue el Botafogo, con el que obtuvo tres campeonatos nacionales brasileños, aunque también jugó en otros dos grandes de la liga carioca: el Corinthians y el Flamengo.
Pero Garrincha era una persona poco equilibrada; fue un gran amante de la noche, las mujeres y el alcohol y se dice que fumó ininterrumpidamente desde los once años. El fútbol y la vida fueron para él una diversión, nunca pensó en el futuro: se asegura que cuando el árbitro dio el pitido que daba por terminada la Final del Mundial de Suecia, que los brasileños habían ganado por 5-2, el jugador se sorprendió de la alegría de todos y se disgustó cuando se enteró de que ya no habría más partidos. Su vida, una vez retirado del balompié, fue un auténtico caos: alcoholizado y sin un duro, fue dando tumbos, se casó tres veces y, al parecer, tuvo hasta 36 hijos, aunque solamente reconoció a nueve, muriendo en la más absoluta miseria el 20 de enero de 1983 en Río de Janeiro, según los médicos como consecuencia de un síndrome alcohólico y una posterior congestión pulmonar. En el estadio Maracaná se celebró un impresionante velatorio, siendo su ataúd fue cubierto con la bandera del club que lo vio brillar, el Botafogo.
Son unos cuantos lo casos de futbolistas a los que el alcohol destroza la vida -George Best, Paul Gascoigne, Gerd Muller, Reinhard Libuda, Jimmy Greaves, ...-, pero tal desgracia no puede empañar la enorme calida futbolística de estas personas; es el caso de Garrincha, un niño inmaduro que regateaba mejor que nadie.
14 comentarios:
Había oído eso de que murió en la más absoluta de las miserias. Siempre me han dado pena esos casos de personas que han tenido todo y acaban en la miseria, pero sobre todo, solos.
Hace tiempo que descubrí que todo buen jugador -a todos los niveles, pues lo vi también en el colegio- era zambo, siempre las piernas arqueadas. Debe ser una condición para jugar bien a fútbol. Y por eso nunca he jugado bien
Es cierto que, en especial los extremos, suelen tener las piernas "garrosas"; hay figuras muy típicas de futbolistas: más bien bajitos y con piernas musculosas y torcidas.
Lo de ser "garroso", como tú dices, también suele ser característico de personas que montan a caballo. La imagen que suele venir a la memoria del actor John Wayne, por ejemplo, es así, con las piernas arqueadas (y vestido del Lejano Oeste, claro). Se me ocurren más ejemplos. Me acuerdo ahora del cantante Peret, no sé si sería por exigencias de la rumba. Y mi madre se empeñaba en decir que Alfredo Landa también era un poco "garroso".
John Wayne era alto, bien plantado ... lo que hace cuando menos chocante esa comparación con Peret y Alfredo Landa .... es como comparar a Humphrey Bogart con Pepe Isbert....;)
Aclaración por la que comienzo en todos los post de futbol; no sé de fútbol... y a partir de aquí mis observaciones.
Garrincha me suena lejanamente y he visto el video, me ha sorprendido la forma de jugar, concretamente de driblar y de llevar la pelota muy pegada al pie. Creo que Messi tiene algo parecido a esa forma de jugar, tal vez sea la estatura lo que ayude (es la misma, 1,68m)o llevar muy bajo el punto de gravedad pero reconozco gestos.
Un saludo Modestino!
Messi es un jugador posiblemente más completo, entre otras razones porque a diferencia de Garrincha, es un jugador disciplinado y que se toma en serio los entrenamientos: estuvo formándose en la "Masía" desde pequeñito.
Por otra parte, el fútbol de entonces tenía mucho más de improvisación y genialidad que el de ahora, con sus pros y sus contras.
Fijaté Veronicia que por fin en un post de fútbol no hablas de Lew Yaschine ... ;)
Modestino como me dices esto, tu ya sabias con quien estaba en el campo Garrincha el 15 de junio de 1958 (y se veía un poquitín en el video que has puesto pero ya perdonarás mi falta de atención totalmente concentrada en el protagonista) con Lev Yashin!;)
Es cierto¡¡¡, ganas 1-0....
Un personaje fascinante :) siempre nos atraen más las historias de éxitos fulgurantes con reverso tenebroso supongo. La canción de Zitarrosa es apabullante, y también está bien "filho maravilha" de Jorge Ben Jor, creo que se llama, me parece que también se dedicó a él, aunque de esto no estoy absolutamente seguro.
Un saludo, enhorabuena por el blog :)
Sí, estas historias de perdedores suelen dar bastante de sí.
Bienvenido a estos lares, explorador; navegaré por tus mares.
"El del medio de los Chichos" también tenía las piernas "garrosas". Y no creo que fuera por sacar córners.
Salud!
Un día tendría que hacer uh post sobre Los Chichos ... toda una filosofía de ld vida; y vete a saber lo que entendían éstos por sacar un corner...
Yo repito lo que ha dicho Veronicia, pero este post me ha enganchado, Modestino. Ni idea del tema de las piernas. Claro. Es de lógica... El contrario no sabe por dónde irá el esférico ( me hace gracia este sinónimo de pelota).
Qué lástima esa repetida asociación del futbolista que triunfa y que acaba destrozado por los abusos de alcohol y drogas. ¿Podría ser que, siendo demasiado jóvenes, no asimilen la fama y un exceso de dinero?
Saludos desde Tarraco
En aquella época se ganaba mucho menos dinero con el fútbol y era más frecuente que al retirarse los jugadores tuvieran el riesgo de regresar al arroyo.
Ahora también ocurre a veces, pero pienso que el peligro mayor es que ganen demasiado dinero demasiado pronto y se aburguesen: hay jugadores que duran poco a buen nivel, aunque los hay que son profesionales de los pies a la cabeza: Iniesta, Xavi, Casillas, Villa, ...
Publicar un comentario