17 de agosto de 2011

Jazz en la noche oscense


El pasado domingo quedé con unos amigos para cenar de tapas en lo que iba a ser la penúltima noche de las fiestas de San Lorenzo; tras un periplo por el "Mi Bar", el "Da Vinci" y el "Tomate-Jamón", donde además de disfrutar de las delicias de la gastronomía oscense comprobamos que a pesar de la crisis las terrazas siguen estando llenas, terminamos tomando una copa en la terraza del "Café del Arte", sito en la Plaza de Navarra, auténtico corazón de la ciudad y lugar grato y tranquilo, aunque en este caso la tranquilidad andaba alterada por un grupo de tamborileros portugués que demostraba sus dotes a la altura de los Porches de Galicia.

Pero la noche nos tenía deparada una sorpresa, pues al poco rato de empezar a degustar el combinado aparecieron seis individuos vestidos con pantalón negro y camisa roja chillona que resultaron ser los miembros de la "Missisipi Jazz Band", un grupo de jazz que, a pesar del nombre, está compuesto por franceses; con los instrumentos oportunos -banjo, platillos, saxofón, trompeta, tuba y trompón- nos deleitaron con varias piezas que dieron al momento esa carga mágica y mítica que convierte estos ratos en deliciosos. No solamente era la belleza de una música tocada con acierto, sino todo el ambiente que se creó en torno a ellos, comenzando con su propio estilo desenfadado que te trasladaba a Nueva Orleans; los miembros de la banda eran ya talluditos y funcionaban con una cierta anarquía que los hacía, si cabe, más atractivos. La belleza de la estampa venía adornada por una pequeña barra instalada en la zona donde tocaban los músicos en la que una morenaza con coleta y pendientes de aro grande preparaba mojitos sin parar: tengo la impresión de que la chica debió de batir el record "Guiness" de elaboración de mojitos, y tras verla creo que he aprendido definitivamente a fabricar tan apetecible refresco.

Fueron unos minutos encantadores, el tiempo se paró y lo único malo fue que se terminó demasiado pronto; además lo de los mojitos lo descubrí después de pedir el gin-tonic, con lo que lo tuve que dejar para otro día. El plan tenía su colofón en el concierto que Mike Kénnedy, el legendario solista de "Los Bravos" daba en Interpeñas, pero el hombre anda ya tan terminal que mejor no incidir en el tema.


6 comentarios:

Brunetti dijo...

Me imagino vuestra satisfacción por la irrupción en la Plaza de Navarra de la banda de jazz, así como de los mojitos y de la guapa mojitera que los elaboraba.

Pero me habría gustado que te explayaras algo más en la actuación del otrora gran Mike Kennedy. Morboso que es uno, ya sabes.

Modestino dijo...

Fui a ver a Mike Kennedy con la intención de dedicarle luego un post; conserva cierta fuerza y cantó temas como "Los chicos con las chicas", "Que te quiero corazón", "Un payaso loco" y "La motocicleta"; como se puso a llover se suspendió y nos perdimos "Black is black", "Bright a little loven", ...

Pero ha perdido voz y muchas veces ni se le entendía, y se quiso ganar al personal a base de groserías, ... pensé que no valía la pena el post.

Driver dijo...

El jazz conserva ese punto de frescura que refresca el gaznate entre sonidos limpios y aparentemente improvisados.
Ese aparente caos compositivo te deja el sabor del apunte rápido en dibujo, de la crónica telegráfica, del baile esporádico y tribal.
El jazz bebe de sus raíces negras, dejándote un regusto vivo, desenredeando algunas volutas de tu ADN musical.
Ésas que una vez sueltas, te llevan a paisajes donde una morenaza prepara mojitos con la rapidez y el entusiasmo de los ángeles.
Conformando sin duda la que podría ser la antesala del cielo.
...

Si en el cielo hay hilo musical, sin duda se trata de jazz.
Y si hay bar, servirán mojitos.

Las almas agradecen estos detalles divinos.

Modestino dijo...

Estoy seguro de que en el cielo hay bar, Driver ... y la morena del otro día tendrá alas para hacerte los mojitos.

tomae dijo...

Si los chicos te recordaban a New Orleans, y por el ritmo de la canción que nos has traído hoy, aquello que escuchabas seguro que era Dixiland, variante del Jazz con orígenes de aquel lugar. En Tarragona celebran cada año un festival "Dixie" donde acuden bandas de muchos lugares, nuestro amigo Brunnetti nos podría dar cuenta de ello.

Modestino dijo...

Mi ignorancia del jazz es superlativa, por lo que no te puedo asegurar que la música fuera esa, ... y lo de Nueva Orleans lo puse generalizando.

Solo recuerdo que sonaban muy bien.