22 de noviembre de 2011

Punto final a la campaña



Por fin terminó la campaña, y más que en ninguna otra ocasión estaba deseando que llegara el día de las elecciones y se acabaran las encuestas, las promesas, las palabras vanas, las verdades a medias, las mentiras insinuadas y demás circunstancias tan propias y habituales cuando se trata de intentar llevar al huerto al elector. En los duros tiempos que corren, con el país al borde de la quiebra y el futuro más negro que el reinado de Witiza, comenzaba a sonar a excesivo y prescindible tanto gasto en jolgorios electorales.

Ni es mi intención ni me parece oportuno hacer valoraciones del resultado de las elecciones al Congreso y Senado del pasado domingo, un resultado que, además, en esta ocasión parecía cantado. Y precisamente de ésto surge mi primer planteamiento: ¿es realmente necesaria una campaña de 15 días?, ¿en qué medida el reparto escaños salido de las urnas el 20 de noviembre hubiera variado de haberse votado un par de semanas antes?. Y es que cuando veo a los principales líderes políticos dejarse las energías y la voz en un pabellón deportivo, una plaza de toros o un palacio de congresos no dejo de preguntarme si hay alguien entre los generalmente enfervorecidos asistentes que no está convencido de votar a quien le arenga con pasión y fuerza especiales. He llegado a pensar que estos mítines no son más que un espectáculo de masas, el pan y circo que desde la antigua Roma se ofrecía a los ciudadanos; un espectáculo con números estrella, artistas invitados, viejas glorias y hasta algún que otro número cómico al que asisten quienes ya de antemano saben que van a divertirse.

Más serio me parece el tema de una semana como la pasada, trágica en lo relativo a la economía nacional y en la que mientras la famosa prima de riesgo crecía imparablemente y la horripilante palabra "rescate" sobrevolaba cual vampiro sobre al espacio aéreo español, nuestros padres de la patria se perdían en disputas, reproches y palabras vanas, como si el negro panorama que asolaba el país pudiera esperar a que solucionaran sus democráticas disputas y rivalidades. La impresión que me ha quedado ha sido que el ciudadano medio ha terminado harto de tanta "mandanga" electoral y con la sensación de que sus preocupaciones, urgentes y graves, no se la van a solucionar ni tirios ni troyanos. Y esto es preocupante, pues no es nada bueno que se desconfíe cada vez más de la clase política.

Más cómico resulta el habitual recurso al tópico; es de risa cómo el día de reflexión cada líder se haga el interesante comentando que lo pasará con la familia, haciendo algo de deporte, escuchando música y/o leyendo un libro: realmente tienen poca imaginación los tipos. Y, por supuesto, cuando tienen que valorar los resultados, o las primeras encuestas "a pie de urna" -no sabía que las urnas tuvieran pies- todos comienzan hablando de "una fiesta de la democracia", "un ejemplo de convivencia" y el "protagonismo de los ciudadanos", frases que suenan a artificial, máxime si oensamos que eso de votar hace años que dejó de ser inhabitual en este país, que el ejemplo de convivencia se puede dar de muchas maneras y, sobre todo, que quien lanza esas afirmaciones lo hace "a vuela pluma", es decir, como si fuera un adorno de oratoria, pues ignora si se ha roto alguna urna, si alguien ha montado la parda o si han puesto silicona en la puerta de acceso al lugar de las votaciones. Y en cuanto al protagonismo ciudadano, tengo la impresión de que con cinco millones de parados muchos de estos ciudadanos preferirían tener el protagonismo en cuestiones más de ordinaria administración.



13 comentarios:

Driver dijo...

La agilidad necesaria para salir de ciertos atolladeros, la imaginación poderosa que nos arrastra al paraje de las ideas, el esfuerzo conjunto que nos hace sudar y hermanarnos con nuestros vecinos, la moderación en los comportaminetos y los verbos, la capacidad de analizar y sintetizar lo que ocurre alrededor, el sano ejercicio del liderazgo que nos arrastra la voluintad hacia un camino común, el sentido común que todo lo baña en lluvia de ideas comprensibles para la gran mayoría, el entusiamo, la participación.
La fe en un futuro construible e inteligible...

Todo eso he echado en falta.

Por eso me toca cada vez más esforzarme por cumplir mis obligaciones como ciudadano.

Echo en falta a los hombres de Estado, aquellos que tras hacer bien su trabajo son retratados con respeto por los mejores artistas plásticos, y cuyos retratos son elevados a la gloria de los museos, para guía y ejemplo de las futuras generciones.

Ya nadie levanta estatuas de bronce sobre pedestales de granito en las plazas públicas.

Huérfanos de líderes andamos en este campo de batalla, aguantando lluvias, vientos y tempestades.

Con el rostro mojado por una lluvia ácida y estéril, construímos sueños individuales.

Lo último que nunca nos pueden robar.

Modestino dijo...

Has estado sembrado, amigo Driver. Yo creo que llevan años inundandonos de tópicos y lugares comunes y ahora que parece que todo se va al garete no sabemos a donde agarrarnos.

Susana dijo...

Con las elecciones pasa como con la vuelta al colegio o la primavera: que ya está todo dicho. Es cierto que a los mítines sólo van los correligionarios, así que no tienen sentido. Pero así funciona este circo. Esperemos que al menos sepan como solucionar las cosas. Un beso.

mujer prevenida vale por dos dijo...

Menos palabras y mas hechos y todos los que tengan un euro en el banco y hablan de éste pais en lugar de ponerlo en bancos que compren deuda.
Si como españoles no confiamos en nuestras propias posibilidades dudo que los demás lo hagan.

Modestino dijo...

No se si tu propuesta, amiga, será bien recibida por muchos.

tomae dijo...

...yo el mismísimo día 20N (a primeras horas de la mañana)
vi un cartel que corría por la red que me hizo bastante gracia, decía:

"Rajoy, Dimisión!!!"

Modestino dijo...

En España tenemos una desbordante imaginación.

mujer prevenida vale por dos dijo...

Si 3.200.000 españoles ( a votar fueron más...) compraran solo 1000 euros de deduda publica toda la anterior emisión de deuda publica española hubiera quedado en manos de españoles.

¿En éste pais no hay 3.200.000 creyentes en nuestro sistema? el PP tuvo 10.800.000 mi votos... pero una cosa es predicar y la otra dar trigo

tomae dijo...

Preve, lo que dices tú es una buena propuesta, Si llego a presidente de mi comunidad y nos encontramos endeudados... no tengo nada más que hacer una "Derrrama" (y no pagaré intereses)

Brunetti dijo...

Bueno, bueno, aparte de cuestiones políticas y económicas de difícil comprensión y solución, lo más importante es que mañana miércoles es 23-N, ¿no te parece, Modestino?

Pues eso.

Modestino dijo...

Sí, amigo Brunetti, un día significativo para algunos. Tómate algo a mí salud.

sunsi dijo...

Observo que no sintonizo demasiado... El domingo fui a votar con más ganas que nunca. Sopla el viento en contra, es verdad. Pero me fío más de los que acaban de llegar que de los que se han ido; mejor dicho, de los que se irán dentro de ¿un mes, más o menos? Podrían hacer una excepción y aligerar los trámites. Falta oxígeno y es urgente ventilar.

Un saludo, Modestino.
¡Felicidades anticipadas!

Modestino dijo...

Yo firmo todo lo que tu dices, Sunsi: solamente he pretendido hacer unas consideraciones sobre en lo que veo se han convertido las campañas electorales.

De los resultados no quería opinar, pero no creo que engañe a nadie a estas alturas y todos saben mis preferencias :).

Gracias¡¡¡