10 de noviembre de 2011

Las siete vidas de "Il cavaliere"



La vida política de Silvio Berlusconi se ha convertido, prácticamente desde su inicio, en una sucesión de escándalos, juicios, excentricidades, salidas de tono, faltas de respeto, corrupción, descaro, ..., a pesar de lo cual el hombre ahí sigue contra viento y marea. Han pasado más de veinte años desde su inicial vinculación al PSI de Bettino Craxi y algunos menos desde que en 1994 llegara al poder con "Forza Italia", fundado para su propia gloria. Su primera aventura como primer ministro fue breve, pero posteriormente ha vuelto a tocar poder: entre 2001 y 2006 de nuevo con Forza Italia y a partir de 2007 con otro nuevo invento denominado "Pòpolo della Libertà". Esta semana parece que la época Berlusconi llega a su fin y aunque en un principio ha resistido los envites, el haberse quedado en minoría le empuja inapelablemente a una proxima dimisión.

La resistencia en las alturas de un personaje de este calibre, que al menos en apariencia no parece tener ni respeto por las personas y las ideas ni sentido del ridículo, me trae a la cabeza la necesidad de fomentar que quienes gobiernan los estados sean, por lo menos, personas virtuosas y ejemplares. Dificilmente se podrá sacar adelante la sociedad propia si al mando de la misma se aposenta alguien que, en frase evangélica, "no teme ni a Dios ni a los hombres". Se podrá ser más o menos torpe o hábil en el manejo de la cosa pública, pero el desastre está asegurado cuando gobierna alguien para quien la trampa y la inmoralidad es el pan nuestro de cada día.

Eso sí, no podemos olvidar que "Il Cavaliere" ha llegado hasta allí por medio de unas elecciones democráticas, con el agravante de que, como se ha dicho, es algo ya reiterado y lo ha hecho con resultados bastante contundentes. Ya en su día Adolf Hitler llegó al poder por la vía democrática algo que, sin ánimo de comparar al milanés con el líder nazi, demuestra que es bueno que haya modos de garantizar la capacidad de reacción ante estas situaciones. Entiendo que cuando en el poder permanece alguien cuya actuación pueda ser considerada nociva para el interés general, el resto de representantes políticos debería aunar esfuerzos y voluntades para deshacer el entuerto por medio de mociones de censura, cuestiones de confianza u otros mecanismos adecuados.

El que la situación política italiana haya llegado hasta los extremos de facilitar el acceso al poder de un hombre como Berlusconi, pienso que puede explicarse también por la desesperación del ciudadano, quien harto de la incapacidad de los partidos tradicionales para resolver sus problemas acaba echándose en los brazos de lo original y lo estrafalario. No podemos olvidar que la historia de Italia ha sido, en los últimos cincuenta años, una ininterrumpida sucesión de acontecimientos políticos turbios, escándalos de todo tipo y crisis permanentes de gobierno. Al final los ciudadanos han terminado tan desquiciados como sus próceres.

Y tras los desastres de Grecia e Italia, el Mediterráneo nos guía hasta nuestro país, que inmerso en proceso electoral parece a la espera, con el corazón encogido, de si le va a pasar como a sus vecinos.


13 comentarios:

Driver dijo...

Ha llegado el momento de "los hombres de Estado".
Si tenemos suerte y nos gobiernan personas competentes, con una carrera y un oficio que cuando salgan del poder les permita seguir ganándose la vida como antes de llegar a él, tal vez y con mucho esfuero, salgamos de esta encerrona histórica e histérica.
...
Un "hombre de Estado" sería aquel que participa del poder, y que sin intentar pasar a la historia contribuye a dejar el solar mejor que cuando lo cogió.
Y entonces, sin quererlo, pasa a la historia.
...
A llegado el momento de los buenos gestores.
La última mano de la partida, suele ser la más importante.

O ganas o te canean.

No hay más opciones.

Susana dijo...

Estoy de acuerdo con el comentario de Driver. Lo que hace falta es menos imagen y más fondo. Un beso.

Modestino dijo...

Yo también estoy con Driver, el problema es que hoy día los aparatos de los partidos son tan fuertes que los polìticos da la impresión que acaban presos de los mismos.

Y luego está el velar por el interés general ... a la vista de cómo estamos, con la gran catarata -en la que nos despeñaremos todos- asomando por el horizonte, es posible que habría que estar más preocupado de unir fuerzas y limar asperezas para remar en la misma dirección que de sacar más o menos diputados.

paterfamilias dijo...

Lo de Berlusconi no tiene nombre, es cierto. Pero la situación en nuestro país tampoco es para tirar cohetes. De momento nos salva la convocatoria de unas elecciones y la esperanza que Europa ha puesto en un cambio, no sólo de gobierno, sino y sobre todo, de forma de gobernar.

Esperaremos acontecimientos.

mujer prevenida vale por dos dijo...

Lo de políticos y honrados me ha hecho buscar este chiste...
"La ONU acaba de finalizar la encuesta más grande e importante de su historia. La pregunta fue: 'Diga honradamente qué opina de la escasez de alimentos en el resto del mundo, por favor'
Los resultados no han podido ser más desalentadores. La encuesta ha sido un total fracaso, porque:
* Los europeos no entendieron qué significaba 'escasez'..
* Los africanos no sabían qué eran 'alimentos'.
* Los israelíes no entendieron qué quería decir 'por favor'..
* Los estadounidenses preguntaban qué significa 'el resto del mundo'.
* Chinos y cubanos pedían que les explicaran qué significa 'opina'.
* Y en los Parlamentos de casi todo el mundo se sigue debatiendo al día de la fecha qué coño es eso de 'honradamente'."

Modestino dijo...

El chiste es buenísimo, Mujer Prevenida.

Paterfamilias: estaba hablando de Berlusconi e Italia, no me desvíes el tema .. ;)

MO dijo...

ainsss.... la erótica del poder de Berlusca, con lo q me gustaba ese tipo cuando empezó!

Diego....Berlusconi se habrá pasado al lado oscuro.. pero era un tipo competente, con carrera y oficio, lástima q supo
abandonar a tiempo.

MO dijo...

q no supo...

Modestino dijo...

Muchas veces le han perdido las formas y la prepotencia, me parece.

Brunetti dijo...

A pesar de todos los desmanes y comportamientos nauseabundos que, en su vida privada, ha perpretrado este personaje durante su mandato, tengo la sensación de que la derecha ideológica de toda Europa (no sólo la italiana, que le ha votado y apoyado sin desmayo, lo cual me resulta inverosímil) siempre le ha consentido, perdonado, reído e incluso aplaudido.

Nunca entenderé esa connivencia intelectual de tantos sectores conservadores con este individuo, motivada solo por el hecho de que le ha cerrado el paso a las izquierdas.

'Bienido' sea.

Modestino dijo...

En política, sobre todo en los países latinos, tendemos a ser bastante cerriles en estos temas.

Maireen dijo...

El caso de Berlusconi es más llamativo que otros porque las continuas salidas de tono de este tipo lo convierten en un personaje de astracanada.

Veo que le has contestado a paterfamilias que no desvíe el tema hacia otros políticos, pero no puedo dejar de pensar en los franceses Giscard d'Estaing, Miterrand y Chirac, aparentemente tan serios y circunspectos, a diferencia de Berlusconi, que terminaron sus carreras políticas en medio de escándalos de corrupción y/o procesos. Desgraciadamente, si se ahonda un poco, se pueden encontrar taras semejantes en prácticamente todos los políticos de cierto nivel.

¿Significa eso que no se puede llegar tan arriba sin renunciar a la honestidad y los principios? No lo sé, pero el recuento resulta abrumador.

Modestino dijo...

No quería derivar a la campaña actual, pero lo que dices es cierto y podríamos incluir a algún ex más cercano que ahora alardea de estadista y se marchó habiendo sembrado corrupción en casi todos los ámbitos de la Administrac: Interior, B. O. E., Banco de España, ...